En Bélgica las autoridades han pedido a sus ciudadanos que no se coman el árbol de Navidad. Y tienen buenos motivos

Aunque en algunos países escandinavos cocinan con las agujas de algunos abetos salvajes, no es buena idea comerse el árbol de Navidad

Arbol Navidad
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Ya hemos llegado al ecuador de enero y todavía son muchos los ayuntamientos que no han retirado las luces navideñas de calles y edificios. Y a mucha gente también parece que le cuesta deshacerse del árbol, especialmente a quienes tengan un árbol de Navidad natural, que no se puede llevar al trastero. Aunque hay sitios donde los rescatan, miles de árboles acaban en la basura en toda Europa, por lo que en Bélgica han tenido lo que parecía una magnífica solución: comérselos. El problema es que no era tan buena idea, más bien todo lo contrario.

Por muy natural que sea, no todo lo que nos brinda la madre naturaleza es comestible para el ser humano. Y los pinos y abetos que se utilizan habitualmente para decorar nuestros hogares en Navidad no lo son. Esto que parece de cajón no ha sido tan obviedad estos días en tierras belgas, donde las autoridades sanitarias han tenido que intervenir para pedir a la población que, por favor, nada de comerse el árbol por muchas recetas que se hayan difundido en las redes sociales.

Y es que basta con que se viralice un vídeo en TikTok o Instagram para que el ser humano pierda el criterio y se lance a imitar al influencer de turno sin cuestionar si es o no una buena idea, pudiendo poner en riesgo incluso su salud. Aunque, en este caso, hay que dar un tirón de orejas al Ayuntamiento de Gante, que no dudó en difundir la propuesta en su página de Facebook como sugerencia para evitar el desperdicio de árboles navideños.

El mensaje proclamaba que el árbol de Navidad "es comestible siempre que no sea un tejo o haya sido tratado con un spray resistente al fuego". Incluso en su página web oficial se publicó una pequeña entrada bajo el título "Cómete tu árbol de Navidad", frase que retocó más tarde para que resultara menos contundente. La publicación de Facebook desapareció en cuanto la Agencia Federal de Alimentos de Bélgica (FASFC), advirtió de los riesgos.

Arbol

"Los árboles de Navidad no están destinados a terminar en la cadena alimentaria", afirmaba la portavoz del organismo, Hélène Bonte, recordando además que los árboles ornamentales suelen recibir tratamientos con productos químicos que aumentan aún más los riesgos sanitarios en caso de ingesta.

La propuesta de aprovechar los árboles de Navidad en la cocina no ha sido una idea espontánea, sino que los belgas se han inspirado en las costumbres escandinavas, donde sí existe la tradición de usar ciertos abetos para preparar infusiones y otras elaboraciones culinarias. Pero, como insiste la portavoz de la FASFC, "Las agujas de los pinos de la naturaleza virgen de los países del norte son completamente diferentes a los de los árboles cultivados para Navidad", y recalca que puede tener consecuencias fatales si se ingieren las agujas de un árbol tratado con agentes antifuego u otras sustancias.

Tras este revuelo, el Ayuntamiento de Gante ha modificado su mensaje inicial con algo más de cordura. "No lo confunda con el tejo, ya que es venenoso. Tampoco son comestibles los abetos y pinos que hayan sido tratados, por ejemplo, con aerosoles ignífugos o pesticidas", aclaran las autoridades. Y recuerdan que las autoridades sanitarias desaconsejan por completo comérselo.

Imágenes | Stad Gent - Unsplash/Frames For Your Heart

En DAP | El alcohol de tu cesta de Navidad también caduca: cómo conservar licores y destilados

En DAP | Enero es el mes ideal para podar tus rosales y conseguir una floración de película

Inicio