Danone, uno de los principales promotores de Nutriscore, abandona el sistema. Ya no salen bien parados sus productos

Grupo Danone ha anunciado que va a eliminar el etiquetado frontal Nutriscore de muchos de sus principales productos tras el  último cambio de algoritmo. La multinacional con sede en Francia, especializada en lácteos y agua embotellada, había sido una de las principales promotoras del sistema, que lleva recibiendo multitud de críticas por parte de nutricionistas y expertos en alimentación desde sus inicios.

El sistema de etiquetado Nutriscore compara alimentos que pertenecen a un mismo grupo. Se basa en una escala de cinco colores, de verde oscuro a naranja oscuro, asociados a cinco letras, de la A a la E, reflejando la supuesta calidad global de ese producto en relación con los demás de esa misma categoría; aquí radica la principal crítica que le hacen sus detractores, pues una letra A o B no implica que el alimento o bebida sea saludable, ni tiene en cuenta porciones o ingredientes aislados.

Esto llevaba a casos paradójicos como que unas galletas infantiles, un ultraprocesado, pudieran lucir mejor puntuación que un queso artesanal o el aceite de oliva virgen extra. Para intentar mejorar el sistema y apaciguar las críticas, el año pasado empezaron a modificarse sus algoritmos, generando entonces críticas en sectores como el de las bebidas y refrescos.

Ahora es Danone la compañía que reniega de este sistema de etiquetado porque, según publica Foodnavigator, no están de acuerdo con la nueva forma que tiene de evaluar los productos lácteos. En otras palabras, las bebidas lácteas como la leche, bebidas vegetales y yogures bebibles salen perjudicados.

Con el cambio de algoritmo, la leche y bebidas lácteas ya no se consideran alimentos generales, sino 'bebidas', una categoría en la que solamente el agua mineral puede lograr la calificación A. Así, la leche entera ha pasado de lucir una B a tener una C, y tanto las semidesnatadas como desnatadas son calificadas ahora con una B.

"Este cambio proporciona una visión engañosa de la calidad nutricional y funcional de los productos lácteos bebibles y vegetales, que no está en consonancia con las directrices dietéticas basadas en los alimentos en Europa. Esto genera confusión entre los consumidores, con puntuaciones Nutriscore diferentes para productos que tienen fines nutricionales similares en nuestra dieta, pero que tienen un formato diferente", ha declarado Danone en un comunicado.

En opinión de la empresa, con la que coincide la Asociación Europea de Productos Lácteos, ni la leche ni el yogur bebible deberían considerarse bebidas porque su función primordial no es hidratar, sino nutrir "aportando una gran riqueza nutricional". Este cambio además, alegan, supondría confundir más al consumidor, al calificar de manera diferente los yogures sólidos de los bebibles en botella, que suelen estar colocados juntos en las tiendas.

El Comité Científico de Nutriscore no opina lo mismo, pues considera que los dos tipos de productos no tienen los mismos efectos beneficiosos en la salud, ni cumplen la misma función para el consumidor, que los toma en momentos distintos del día.

Imágenes | Groupe Danone

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