Supermercados Froiz es para muchos una cadena de supermercados con productos de proximidad que, aparentemente ha estado ahí siempre. Esta empresa tiene un importante peso en la historia del emprendimiento español y su nacimiento y desarrollo no fueron, al principio, evidentes.
Magín Alfredo Froiz Planes, nacido en la oscense localidad de Barbastro, era hijo de un combatiente gallego de la batalla del Ebro procedente de una familia de tratantes de ganado.
Tras el nacimiento de Magín, su familia regresó a Galicia, donde se puso al frente de una carnicería en la plaza de Abastos de Pontevedra. Allí, el futuro fundador de supermercados Froiz cursó sus estudios, tarea que compaginaba con la ayuda a su padre a asistir a las ferias de ganado para vender en la carnicería familiar.
Según explicaba él mismo en una entrevista a La Voz de Galicia: “De él (su padre) aprendí a negociar y a valorar el trabajo de los proveedores, el compromiso de la palabra y a cumplir lo pactado”.
Aunque al terminar sus estudios intento probar éxito en la construcción, enseguida volvió al negocio cárnico alquilando, con 22 años, una pequeña carnicería en la misma ciudad de Pontevendra situada dentro de un supermercado, en la calle Cobián Roffignac.
Traspaso a priori ruinoso
Dos años más tarde, desde la tienda le propusieron el traspaso de todo el supermercado (y de una plantilla con una docena de personas), que estaba en situación ruinosa, y se puso al frente del equipo con las que consiguió reflotar el negocio y sacarlo adelante.
Ese fue oficialmente el primer supermercado Froiz, que tuvo una vida de 33 años, como tal, hasta que en el año 2003 la empresa la reconvirtió en un hipermercado urbano que pasaba de tener 300 metros a 4.000.
Pero mucho antes, Magí Alfredo Froiz ya había pisado el acelerador, pues a finales de los años 70 inauguró su segundo supermercado en la misma Pontevedra, y diez años más tarde proyectó un almacén en Lourido que sería la futura sede de la compañía y centro logístico del grupo, que es una de las primeras 20 empresas del sector a nivel nacional.
Con esta base, Froiz se expandió a finales de los 2000 por su zona natural de influencia: las cuatro provincias gallegas, Portugal (en la fronteriza Valença do Minho), las dos Castillas y Madrid.
Según explicaban en La Voz de Galicia con motivo de su muerte desde la empresa, Froiz se consideró siempre “un tendero”, y que su máxima era “servir al cliente y servirle bien”.
Ahora bien, ya poco tiempo antes de morir a los 78 años, Froiz emprendió el que sería su proyecto de mayor envergadura: trasladar desde Lourido hasta Outeda su centro de operaciones para conquistar un espacio de 24.000 metros cuadrados.
Casi 360 tiendas
Su legado no es poco, pues Distribuciones Froiz es el tercer grupo alimentario de Galicia, y se encuentra también entre las 20 primeras posiciones a nivel estatal, al sumar casi 359 puntos de venta en España y en Portugal.
Los supermercados Froiz facturan anualmente 1.000 millones de euros el año pasado (912 millones de media) y cuentan con una plantilla de 6.570 trabajadores. Este incansable trabajador fue galardonado antes de su muerte con numerosos reconocimientos públicos, desde el galardón a Mejor empresario de Galicia o Premio Ciudad de Pontevedra hasta Medalla de Oro de Galicia.
Fotos | Froiz
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