Podrían pasar desapercibidas a ojos despistados, pues, a simple vista, parecen solo una variante más de las patatas fritas de bolsa con sabores que desfilan por los lineales de Mercadona y de cualquier supermercado. Pero si has estado en Canarias es más que probable que conozcas los Munchitos, uno de tantos productos tipiquísimos en las islas que el resto de España no tenemos la suerte de catar. Salvo que llegue Hacendado y los clone, claro.
Se venden con el nombre de Snack frito de patatas sabor a ajo Hacendado, cuesta 1,25 euros la bolsa de 100 g (12,50 €/kg) y es la copia de marca blanca de los Munchitos sabor ajillo, el snack de patata que fabrica y distribuye Matutano en Canarias, "sin conservantes ni colorantes artificiales y con todo el sabor del ajito", en bolsas aún más pequeñas, de 70 g, y a un precio algo más elevado.
La editora de Trendencias Pepa López sí conoce bien los Munchitos y afirma haberse "enamorado" de la versión de Hacendado, confirmando que son una copia muy similar y con un sabor intenso a ajo que quizá no sea apto para los paladares más sensibles a este sabor. Los fabrica Tutichip, una empresa especializada en snacks situada en Sant Esteve Sesrovires (Barcelona), y parece que han dado con la tecla clonando al snack canario.

Porque los Munchitos no son patatas fritas como tal, sino más bien una versión libre de las Pringles. Es decir, no son rodajas de patata frita, sino un snack aireado crujiente elaborado a partir de copos y fécula de patata, aceite vegetal y aromas, además de sal y otros ingredientes. El aperitivo de Mercadona también está hecho a base de harina de patata y fécula, usando aceite de girasol en lugar de maíz, con fécula de tapioca y harina de arroz. En el caso de Hacendado, no lleva glutamato monosódico, potenciador del sabor que sí incorporan los Munchitos originales.
Análisis nutricional aparte -es un aperitivo frito salado saborizado, muy sano no va a ser-, estos Munchitos de Hacendado parece que hacen suyo el eslogan de otra marca famosa de patatas fritas con aquel "no podrás comer solo una", emulado también con las Pringles en su famoso "cuando haces pop, ya no hay stop". Porque, como confirma López, son un vicio y no puedes comerte sola uno.
En DAP | Un anciano en apuros en Mercadona recibe esta respuesta de una cajera: “Gran gesto por su parte”
En DAP | El truco para tunear las bolsas de rafia de Mercadona (o cualquier otro supermercado)