“No me sorprendería que una paloma hubiera robado chucherías”. Una inglesa alucina con esta tienda de chuches de la Boquería

Al hablar de chucherías enseguida se evoca un mundo de colores, ositos, unicornios y sabores dulces y ácidos, muy lejos todo ello de cualquier atisbo de mala onda.

Pues nada más lejos de la realidad: las redes confirman que también las montañas de chucherías pueden resultar desagradables a la vista de algunos, al menos, en lo que se refiere a su puesta en escena.

Lo ha dicho en su cuenta de Tik Tok @sugarrushsweeties, con más de 250.000 seguidores, propietaria de una tienda de gominolas y caramelos en la ciudad inglesa de Garforth, en el condado de Yorkshire. Esta profesional del dulce ha aprovechado las redes para difundir sus conocimientos y compartir sus experiencias en el mundo de las chuches, convirtiéndose en una voz experta con una buena legión de fans que toman nota de sus recomendaciones.

Esta influencer de las chucherías, que recopila en su cuenta de Tik Tok  las mejores tiendas de gominolas del Reino Unido, ha considerado que esta parada tenía muy buen surtido pero dejaba mucho que desear a nivel de higiene.

En su vídeo, titulado Mi opinión sobre una tienda de chuches de Barcelona, la influencer explica que acaba de volver de la capital catalana y que visitó una tienda de estos dulces. “Encontramos una tienda de gominolas en el famoso mercado de Barcelona”, dice probablemente sobre el turístico mercado de la Boqueria, donde los cruceristas se agolpan sobre las paradas.

Para empezar, la tiktoker ensalza que encontró una tienda maravillosa y “con mucha variedad”, pero no tarda en llegarle el palo a esta parada de gominolas, al considerar que no es una tienda nada higiénica a juzgar por lo que encontró en ella.

Según prosigue, “había literalmente palomas aterrizando” en el suelo y en la parada del mercado. “No me sorprendería que una paloma hubiera robado chucherías”, agrega, ya que estos molestos pájaros volaban por todas partes, asegura.

La influencer del dulce aconseja a la tienda que, aunque no sirva para erradicar las palomas, sería un buen invento cubrir las cajas de chucherías “para al menos protegerlas de los gérmenes”.

Esta añade que el mercado es un punto muy concurrido de la ciudad, con mucha gente pasando por el lado de estas chucherías, de modo que considera que “probablemente” pueden caer pelos encima de las gominolas, “quién sabe”, sugiere.

Foto | Polina Tankilevitch/Pexels

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