El investigado podría pertenecer a una red de robo y venta ilegal de alimentos
Lo que comenzó como un control rutinario en el distrito de La Latina acabó convirtiéndose en una de las curiosidades policiales del pasado 10 de febrero en la ciudad de Madrid.
Tras dar el alto a una furgoneta que circulaba con la ITV caducada, la Policía Municipal de Madrid comprobó que la caja del vehíchulo estaba cargada de embutidos, quesos y aceite de oliva, presuntamente robados.
El incidente se produjo poco antes del mediodía y tras comprobar que la furgoneta no había pasado la pertinente ITV, los agentes procedieron a comprobar más posibles irregularidades, tanto del vehículo como del conductor, comprobando que había una carga chacinera en la parte posterior del automóvil.
Tres paletillas de jamón, una botella de tres litros de aceite de oliva, una decena de paquetes de salmón, cuñas de queso y varias piezas de lomo, chorizos y salchichón ibérico… El botín daba para un homenaje navideño, pero todo parecía apuntar a que se trataba de producto robado.
La Policía interrogó al conductor, esperando la presentación de los tickets de compra, aunque no hubo ningún tipo de factura, mientras que los agentes contactaron con el establecimiento, situado en el distrito de Puente de Vallecas, miembro de una conocida red de supermercados y que confirmaron el robo reciente de artículos en varios de sus locales.
Según informa El Mundo, ante la evidencia de la dudosa procedencia de la mercancía, ésta fue intervenida y el conductor, además, investigado por hurto, además de continuar con las diligencias policiales para comprobar la procedencia de las chacinas y si podría tratarse de un hecho vinculado a una red de robo y reventa de alimentos.
Imágenes | Policía Municipal de Madrid
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