Hay dos maneras de plantearse la Navidad: una Navidad express, llena de prisas, con compras de última hora y aperitivos rápidos o una Navidad slow, pausada, tranquila, disfrutada, con sabores intensos que recuerdan a las Navidades de tu infancia.
Apostamos por una Navidad slow, relajada, sin prisas y no por ello una Navidad pegada a los fogones. Nuestra propuesta para este año es combinar la elaboración de platos modernos con el slow cooking.
Como ya os hemos contado en otras ocasiones el slow cooking no es sino la técnica más antigua de cocinar la comida, a fuego lento y durante muchas horas. Lo mismo seguían esta técnica los pueblos que enterraban sus recipientes sobre brasas, como quienes dejaban la olla tapada al calor de los rescoldos o la abuela del inventor de la Crock-Pot, Irving Naxon, que llevaba la olla a su panadero para que con el calor residual del horno de leña, por la noche, se cocinaran los platos. El concepto y la idea es la misma y por eso nos gusta tanto nuestra olla de cocción lenta, porque vamos a preparar deliciosos y originales platos, sin estar pegados a las cocinas.
Muchas razones para apuntarte al slow cooking
Cocinar en nuestra olla de cocción lenta nos aporta dos ventajas principales: una, no es necesario que estemos al pie del cañón, al contrario, nuestra olla de cocción lenta nos pide que no levantemos la tapa durante las horas que dure la cocción, por lo que podemos dedicarnos a otra cosa y dos, los sabores son intensos, concentrados, fruto de esos largos tiempos, de esa cocción lenta y de no destapar nunca la olla.
Cocinar un buen asado, guiso, incluso mermeladas para los aperitivos no sólo es fácil, sino que no es ninguna carga de trabajo con la técnica del slow cooking. Lo único que tenemos que tener en cuenta con esta filosofía de cocinar es la planificación: saber qué vamos a cocinar para tener los ingredientes necesarios.
Como Navidad y planificación de comidas van unidas de la mano ahora solo tenemos que diseñar nuestros menús festivos. Nuestra propuesta en este caso es combinar la técnica más antigua de cocinado, la cocción lenta, con recetas más modernas, novedosas, distintas y originales para nuestra mesa navideña.
Llena tu mesa de mermeladas, chutneys y salsas
No hay mesa navideña sin aperitivos y no hay mejor combinación que la del dulce-salado. Son éxito asegurado la mermelada de tomate y la de pimientos rojos. Nuestra sugerencia: darle un toque exótico preparando deliciosos chutneys de piña, mango, melocotón o zanahoria. Estas mermeladas de origen indio con especias darán a tu mesa un plus. No nos olvidamos de los clásicos nacionales: preparar una salsa romesco es éxito garantizado y combinan tanto con verduras como las alcachofas crujientes o los espárragos trigueros, como con los mejillones y las sardinas.
Un clásico que nunca falla con un lavado de cara: las carnes rellenas
Pavo, pollo, cerdo o ternera, con todas las carnes obtendremos excelentes resultados. Lo importante es preparar un relleno que nos aporte jugosidad y sellarla antes de poner en la olla de cocción lenta. Y ahora a por las salsas: de manzana, de setas, de naranja, de uvas y por supuesto, la mítica salsa de arándanos, son excelentes acompañamientos para nuestro redondo de carne.
Atrévete a poner legumbres en la mesa
Como aperitivo, en pequeños cuencos. Uno de los alimentos que más ama la olla de cocción lenta son las legumbres. Dales un toque navideño preparando recetas ligeras: garbanzos con pulpo, alubias con almejas o lentejas con calamares son propuestas muy interesantes.
Qué no falte la carne
Después de las legumbres son el segundo mejor aliado de tu Crock-Pot. Un guiso o estofado está más rico cuanto más tiempo se está cocinando a fuego lento, por lo que cocinar carnes es apostar siempre a caballo ganador. Y como es caballo ganador nuestro reto consistirá en internacionalizar la mesa navideña: comenzamos suavemente con unas carrilleras de ternera a la cerveza negra. Seguimos con el vitello tonnato, grandiosa combinación de ternera y atún. Si viajamos más al este podemos preparar la conocidísima moussaka. Y llegado desde el mismísimo oriente el pollo tikka masala.
Viva las verduras y hortalizas.
No pueden faltar en la mesa. Sazona patatas baby con pimentón, especias cajún o curry, aportará un sabor distinto a los platos. Prepara lasaña vegetal, mucho más digestiva!
La Crock-Pot no sólo es una olla que estamos redescubriendo, es un estilo de cocina y si la unimos a lo mejor de la gastronomía 2.0 dará como resultados maravillosos platos internacionales que lucirán en nuestras mesas estas Navidades y sorprenderán a nuestros comensales.
Fotos: Crock-Pot España, IngaNielsen, Alleko, Denio Rigacci, Fudio, AlexRaths