Aprende a preparar la masa para cocinar este delicioso postre de temporada
La llegada del mes de octubre nos anuncia que estamos cada vez más cerca del Días de Muertos, una celebración que es de las favoritas de muchos mexicanos y sinónimo de fiesta: ya que se come pan de muerto y se ponen altares para los familiares que han fallecido, mismos que puedes elaborar aprendiendo la receta de la masa de pan de muerto.
Para que no lo compres y disfrutes a tu antojo este delicioso postre, es que te compartimos una receta tradicional para elaborarlo como lo hacían nuestros antepasados, pues el pan de muerto tiene su origen desde la época de la conquista.
De acuerdo a información de la Secretaria de Cultura de México, "este pan redondo, adornado de 'huesos' de masa, tiene como ingredientes principales la harina de trigo, azúcar, huevos, y generalmente está adornado con ajonjolí o bien cubierto de azúcar, como toque especial perfumado con naranja y anís.
Consejos para hacer el mejor pan de muerto
La masa debe reposar lo suficiente para que la levadura actúe completamente.
- Asegúrate de no sobrecargar la masa con pasas o almendras, ya que esto puede dificultar el proceso de amasado.
- El tiempo de cocción dependerá del tamaño exacto de tus panes, pero generalmente tardan entre 20-25 minutos en hornearse.
- Usa ingredientes frescos y de buena calidad para obtener mejores resultados.
- Mantén la masa en un lugar cálido y húmedo durante el proceso de fermentación.
- No sobre-espolvorees la masa con harina mientras estás formando los panes para evitar que pierdan su textura.
Cómo elaborar masa para el pan de muerto
Comenzamos mezclando en un tazón pequeño 40 g de levadura fresca o 10 g de levadura seca con 250 ml de leche tibia y una cucharada de azúcar. Deja reposar por unos 10 minutos hasta que veas burbujas y esté espumosa.
Formamos un volcán con la harina sobre una mesa o dentro de un bowl grande. En el centro, añade 200 g de azúcar, 5 huevos medianos, 250 g de mantequilla, la ralladura de naranja, 1 cucharadita de extracto de vainilla, y el agua de azahar. Agrega también la levadura activada.
Amasa durante unos 15-20 minutos, hasta obtener una masa suave y elástica. Si la masa está muy pegajosa, agrega un poco más de harina, pero sin exagerar. Coloca la masa en un bol engrasado y cúbrela con un paño húmedo. Déjala reposar en un lugar cálido hasta que duplique su tamaño (esto tomará alrededor de 1-2 horas).
Después del reposo, divide la masa en porciones pequeñas para hacer 15 panes. Deja un poco de masa para formar las tradicionales tirillas y bolitas que van encima. Forma bolas con cada porción, y decora con las tirillas simulando los huesos y una bolita en el centro.
Coloca los panes en una charola para hornear con papel encerado. Cúbrelos con un paño y deja que reposen por 30-45 minutos para que vuelvan a esponjar.
Precalienta el horno a 180°C (350°F) y hornea los panes durante 20-25 minutos, o hasta que estén dorados en la superficie y suenen huecos al golpearlos ligeramente en la base.
Una vez horneados, deja enfriar y barniza los panes con mantequilla derretida y espolvorea con azúcar al gusto.
¿Con qué acompañar el pan de muerto?
Como lo más popular es acompañarlo con bebidas calientes, puedes apostar a complementar este pan con atole beso de ángel o el atole de nalga, dos variantes deliciosas para un capricho único para los primeros días de frío del año.
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