El truco para recalentar el café y que no sepa a quemado

El truco para recalentar el café y que no sepa a quemado
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Si preguntas a un experto en cafés sobre la mejor forma de recalentar el café su respuesta será siempre la misma: no recalentarlo.

Los baristas son bastante estrictos al respecto, y con razón. Lo cierto es que el café va perdiendo parte de sus propiedades organolépticas solo unos minutos después de haberse preparado pues se oxida muy rápidamente: no solo por exposición al aire, sino también al oxígeno de la propia agua. Debido a esto, el pH del café se eleva rápidamente, cada vez es más amargo y, en definitiva, se descomponen los sabores que hacían que el café estuviera rico.

La mayoría de los mortales calienta en el microondas el café a máxima potencia que es, en realidad, lo peor que se puede hacer. Al calentar el café muy rápidamente los pocos compuestos aromáticos que quedan en el café acaban desapareciendo y va a saber aún más a quemado, pues se fuerza una nueva extracción a los posos que contiene.

Puestos a elegir, es mucho mejor calentarlo lentamente, ya sea en una olla a fuego lento o en el microondas a potencia baja. Si bien no tendrá el mismo sabor, porque los compuestos cambian constantemente, calentarlo a baja potencia es la mejor opción para conservar los aromas y el sabor que le quedan al café y, además, te garantizará no volver a quemarlo.

Es un mal menor que, no obstante, se puede evitar si usamos un truco distinto para recalentar el café.

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Calienta el agua o la leche

Kim Ossenblok, experto barista belga asentado en Barcelona, es autor del libro ¡Al grano!, un completo manual para comprar, preparar y degustar el café. Aunque insiste una y otra vez en que para disfrutar de un buen café hay que tomarlo en el momento, concede un truco para aprovechar, si hemos calculado mal, el café que nos ha sobrado.

Chemex CM-1C - Cafetera de vacío

En ningún caso, asegura, debemos recalentar el propio café, pero si podemos calentar agua o leche y mezclarlo con el café frío: esto evita que el café se degrade más, pero nos permitirá disfrutarlo caliente.

Otra opción para reutilizar el café sobrante es aprovecharlo para la elaboración de alguna receta, como un bizcocho de café o cualquier otro postre que lleve este ingrediente.

Imágenes | iStock
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