Qué echarle al yogur natural: la magia de mezclarlo con otros ingredientes

Cuáles son las mejores combinaciones para potenciar el sabor y los beneficios del yogur natural para un resultado brutal

El yogur natural es un alimento muy interesante. Está hecho a partir de la fermentación de la leche con bacterias beneficiosas, como el Lactobacillus bulgaricus y el Streptococcus thermophilus. Estas bacterias convierten la lactosa de la leche en ácido láctico, lo que le da al yogur su textura y sabor tan particular.

El yogur tiene sus orígenes en las antiguas civilizaciones de Mesopotamia, donde se cree que se descubrió por accidente. Se piensa que la leche almacenada en recipientes de piel de animales pudo haber fermentado debido a las altas temperaturas del Medio Oriente, dando como resultado el primer yogur. Esta técnica de fermentación casera se fue perfeccionando y difundiendo a lo largo de los siglos en diferentes culturas.

Hoy en día, el yogur se consume en todo el mundo y existen numerosas variedades y sabores. Tal es su popularidad, que se puede consumir de diversas formas: solo, con frutas frescas, miel, frutos secos o granola. También se utiliza en recetas de postres, salsas o aderezos, hasta bizcochos y magdalenas.

Nutricionalmente, es una excelente fuente de calcio, proteínas y probióticos que benefician la salud intestinal. El yogur natural se caracteriza por tener un sabor ligeramente ácido y fresco, con un toque cremoso y suave en la boca. Al no tener azúcar agregada u otros sabores artificiales, el yogur natural recupera un sabor puro y auténtico.

El grado de acidez puede variar ligeramente dependiendo de la marca o del tipo de leche utilizada, pero en general se destaca por su equilibrio entre lo ácido y lo cremoso. Aunque también se puede hacer yogur de forma casera sin grandes complicaciones.

El yogur natural tiene la capacidad de actuar como un lienzo en blanco en las recetas, ya que puede transformarse en creaciones dulces o saladas. Por esto, combina muy bien con una variedad de ingredientes que realzan su sabor y textura.

Funciona de maravilla con las frutas, como las fresas, plátano, mango, frambuesas, arándanos, kiwi o piña ya sea en un cuenco de Birchermüesli suizo o porridge  de arroz con yogur y uvas pasas. También marida con verduras como el pepino, zanahoria y remolacha hasta tubérculos para una ensalada de patatas, pepino y maíz dulce para combatir el calor.

Del universo de las especias, combina especialmente bien con la canela, el cardamomo, el jengibre y la menta. Además de las nueces, almendras y pistachos para lograr unas barritas heladas deliciosas, se puede endulzar con miel, sirope de dátiles o stevia.

El yogur natural se puede combinar también con una variedad de proteínas, tanto de origen animal como vegetal, para crear platos nutritivos y deliciosos. Como puede ser un pollo al carbón desmenuzado, croquetas de jamón serrano o salmón ahumado. De ser vegetariano y vegano, complementa una porción de quinoa en el microondas, revuelto de harina de garbanzos y espinaca y filetes de tofu empanado crujiente.

La versatilidad del ingrediente permite integrarlo en una gran variedad platos para darles un toque cremoso y delicioso.

Imagen | Foto 1: jcomp, Foto 2: freepik

En DAP | 11 ideas de recetas con yogur, ideales para el desayuno

En DAP | Cómo hacer yogur griego casero sin yogurtera, la receta más fácil

Ver todos los comentarios en https://www.directoalpaladar.com

VER Comentarios

Portada de Directo al Paladar