Hacer cupcakes caseros no es complicado, pero si tenemos las herramientas adecuadas para elaborarlos mucho mejor. Siempre podemos arreglárnoslas con utensilios que tengamos por casa si somos aficionados a la repostería, pero os quiero contar las herramientas que no deben faltar en tu cocina para que el resultado sea profesional.
También veremos otros utensilios opcionales, que aunque no son imprescindibles, sí te pueden ayudar a darle un toque final de presentación y conservación perfecto.
Utensilios básicos para hacer cupcakes
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Batidora con accesorio de varillas: Aunque para elaborar la masa de los cupcakes podemos valernos de unas varillas manuales, para hacer la decoración con buttercream es imprescindible utilizar una batidora eléctrica. Tampoco hace falta un súper robot de cocina, con una batidora eléctrica normal con varillas, nuestra crema de mantequilla resultará suave y perfectamente montada.
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Tamizador: Para conseguir una masa de bizcocho fina y esponjosa debemos tamizar los ingredientes secos, como la harina o el cacao. En el mercado existen diferentes tipos de tamizadores, pero con un simpe colador de malla fina es suficiente para este menester.
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Cuencos: Necesitamos varios recipientes para elaborar nuestras recetas de cupcakes. Tanto para pesar los ingredientes como para hacer la mezcla de la masa. Me gustan mucho los de vidrio, pero se pueden utilizar otros materiales como loza o plástico.
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Balanza o peso: La repostería es como la química, cualquier ingrediente que variemos puede hacer que nuestra receta sea un desastre, así que lo mejor es que pesemos todos los ingredientes para evitarnos sorpresas desagradables. Las mejores son las digitales, muy precisas, y por poco dinero las podemos encontrar de muy buena calidad. Además te resultará útil si cocinas a menudo, sobre todo repostería.
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Bandeja para hornear: Es fundamental para que las cápsulas no se abran durante el horneado y la cocción de los bizcochos sea uniforme. A mí me gustan las rígidas de metal, pero podéis encontrarlas de silicona, aunque resultan un poco más inestables a la hora de manipularlas ya que debes manipular también la bandeja del horno para que no se deforme. Existe el tamaño estándar para 12 cupcakes y también versión mini por si deseas hacer cupcakes más pequeños.
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Rejilla para enfriar: Resulta muy importante que los cupcakes se enfríen sobre una rejilla para evitar que el vapor que generan haga que se desprendan de las cápsulas. Se pueden utilizar también para bizcochos y galletas, así que es una buena inversión.
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Cápsulas: Es fundamental que resistan bien la grasa que contiene la masa. Intentad comprar cápsulas de calidad para que durante el horneado no se transparenten y pierdan color. Una buena forma de comprobar si son aptas es tocando el papel, si es posible. Debe ser grueso y de colores vivos, aunque lo más fiable es confiar en las marcas más prestigiosas de utensilios para repostería creativa.
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Manga pastelera y boquillas: Para adornar nuestros cupcakes necesitamos mangas pasteleras. Me gustan más las desechables, son más prácticas e higiénicas, ya que por mucho que las permanentes se laven y aireen perfectamente, en ocasiones es inevitable que cojan olores e incluso pueden ser núcleo de bacterias. También necesitaremos boquillas para dar el acabado perfecto a los cupcakes. Existen de muchas formas y tamaños, así que podemos elegir las que más nos gusten según la ocasión o el tema con el que adornemos nuestros pequeños bizcochos.
Menaje opcional que te resultará útil
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Espátula: Muy útil para cubrir los cupcakes. Se utiliza en los casos en los que los cubramos con buttercream o cremas similares. En su ausencia, un cuchillo de mantequilla, tipo untador, nos puede sacar de un apuro aunque no tenga la misma forma exactamente.
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Lengua de silicona: Es muy útil para rebañar los cuencos de masa e ingredientes y para mezclar con suavidad. También nos podemos arreglar con una cuchara de silicona, pero la lengua resulta más cómoda.
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Cucharas y tazas medidoras: Muchas recetas de cupcakes no están adaptadas a nuestro sistema métrico por lo que las medidas están representadas en tazas y cucharadas. Por esta razón, un juego de éstas nunca está de más. El juego de cucharas lo utilizarás también para casi todas las recetas, así que tenlo en cuenta.
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Cuchara de helado: Puede sonar raro pero es muy útil para echar porciones iguales de masa en cada cápsula. De esta forma nos aseguramos de que todos los cupcakes tienen el mismo tamaño. También a la hora de adornarlos, podemos medir la crema de este modo.
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Descorazonador: Es el mismo que se usa para la fruta. Si no tenéis uno, es totalmente recomendable. En un momento sacáis una porción de bizcocho del cupcake con esta herramienta y podéis rellenarlo sin dificultad.
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Cortadores para fondant: Esta herramienta es exclusivamente para decorar, por lo que es opcional, y siempre que queráis adornar los cupcakes con fondant. Existen miles de cortadores de varios tipos, con expulsor, sin expulsor, con texturas de silicona, simples…y de muchas formas y tamaños. Lo mejor es que penséis qué queréis hacer y adquiráis algún cortador básico y en caso de necesitar más ir poco a poco.
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Rodillo antiadherente: Este tipo de rodillo también es muy útil para trabajar fondant, ya que evita que se pegue al rodillo y nos volvamos locos al manipularlo. Los hay de muchos precios y realmente la calidad y el resultado a la hora de trabajar es idéntico, tenedlo en cuenta a la hora de comprarlo.
Espero que lo que os he contado sobre estas herramientas para elaborar vuestros cupcakes en casa os haya resultado útil y aclaratorio. Tanto si estáis empezando en este mundo apasionante de los cupcakes, como si ya estáis metidos en materia, es interesante conocer todas las opciones posibles que nos ofrecen estos utensilios de cara a tener una ayuda extra en la cocina.
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