Cómo hacer galletas en la freidora de aire para que te queden perfectas sin encender el horno

Fue al descubrir el verdadero potencial que tienen las airfryers cuando estos aparatos despegaron como el electrodoméstico de moda. Porque, aunque no funcionan exactamente igual, una freidora de aire es como un mini horno, por lo que también podemos preparar dulces horneados como bizcochos o galletas. Pero, si quieres que te salgan realmente bien, hay que tener en cuenta ciertos factores. No se trata solo de cambiar de aparato.

Puedes partir de elaboraciones específicas de recetas para freidora de aire, pero también es posible adaptar recetas de galletas de todo tipo a la airfryer. Aunque no saldrán exactamente igual, puede que incluso el resultado te guste más; depende de cada paladar, de las recetas en concreto y de los distintos modelos.

Qué tipo de galletas puedes hacer en la freidora de aire

Resumiendo mucho: todas. Teniendo en cuenta que una galleta es una masa cruda que se cuece por la acción de altas temperaturas, la freidora de aire cumplirá esa función, y lo hará mejor que el microondas, por ejemplo, que más bien cuece al vapor. La airfryer cocina mediante calor por convección en forma de aire caliente en movimiento; esto quiere decir que las galletas también se doran y tuestan por fuera. Así podemos obtener galletas tiernas por dentro, pero crujientes y doradas en el exterior, dependiendo de la receta.

El principal impedimento está en el tamaño del cesto; si es un modelo muy pequeño no podrás hacer galletas muy grandes o alargadas, o tendrás que cocinarlas por tandas. Tampoco podrás hacer galletas que exijan un molde concreto no apto para este electrodoméstico.

Cómo cocinar galletas en una airfryer

Si tu aparato tiene el programa o modo prestablecido de 'hornear', o alguno similar, úsalo. Algunas freidoras incluso cuentan con programa para bizcochos, dulces y galletas. En caso contrario, marca tú la temperatura; 175ºC  es lo ideal, como cifra media estándar.

Si estás adaptando una receta de galletas para horno, reduce la temperatura que indique unos 5ºC, pues las freidoras de aire tienen a calentar más mucho más rápido. Cuando tengas tiempo, refrigera las galletas antes de cocinarlas unos 20-30 minutos, para evitar que se hagan demasiado pronto. Y precalienta la freidora; dos o tres minutos bastarán.

Nunca coloques las galletas directamente en el cesto o cesta; cúbrelo con papel antiadherente apto o usa los cestos desechables o de silicona que venden específicamente para las freidoras de aire. Cada masa de galletas es un mundo y algunas se expanden mucho, así que procura no colocar las masas crudas muy cerca unas de otras si crees que pueden pegar.

Ten en cuenta que una airfryer cocina mucho más rápido que el horno; según el modelo y la receta, como han comprobado en King Arthur Baking, podría reducirse el tiempo hasta en un 40% respecto a lo que tardarían en hornearse. Las galletas más ricas en azúcares se queman antes, así que tenlo en cuenta también.

Lo mejor es cocinar una sola galleta de prueba la primera vez para que te hagas una idea de cómo queda y cuánto tiempo necesita. Si quieres galletas muy doradas y crujientes, pero quizá queden poco hechas por dentro. En este caso, cubre el cesto con papel de aluminio bien remetido en los laterales del cesto y retíralo a mitad de la cocción. No hace falta que rotes las galletas, salvo que uses una freidora de aire tipo mini horno.

La gran velocidad a la que se cocinan y las pequeñas dimensiones de este aparato son ideales para tener masa de galletas congelada y cocinar solo unas pocas cada vez en pocos minutos. Nada mejor que poder disfrutar de una galleta casera recién hecha cuando te asalta el antojo o vienen invitados improvisados.

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