Mi drama con el pan húmedo de sándwiches y tostadas calientes y el truco para solucionarlo fácilmente

Hay sándwiches que gustan más con el pan tiernecito, como los típicos que protagonizan las mesas de cumpleaños infantiles. Sin embargo, un buen sándwich de desayuno, merienda o cena, nos gusta caliente, jugoso por dentro y bien crujiente por fuera, igual que una buena tostada o tosta recién hecha. Pero la física nos juega una mala pasada al dejar el pan sobre el plato.

El calor que despide la rebanada inferior genera un vapor que al chocar con la superficie donde lo apoyamos se transforma en gotitas que en pocos instantes nos fastidian esa textura crujiente de nuestro sándwich o tostada. Es un detalle quizá menor, pero fastidioso, pues a nadie le gusta palpar esa corteza húmeda, ya más blandurria, algo correosa, que deja un poso acuoso en el plato, impidiendo que podamos volver a apoyar la porción sin estropearlo más.

Las únicas opciones que tenemos son aguantarnos, como toda la vida, o trabajar y comer muy rápido montando el sándwich o untando la tostada casi quemándonos, prácticamente llevando el plato terminado directamente a la boca.

Ahora entendemos por qué en las mesas refinadas de esos desayunos de ensueño que se ven en series de época como Downton Abbey o Gentleman Jack usan un artilugio metálico para servir las tostadas sin apilarlas, en vertical y dejando que el aire circule entre ellas.

Pero si también sois perfeccionistas y este tipo de inconvenientes os amargan un poco la existencia cotidiana, hay un truco muy fácil de aplicar que ofrece buenos resultados. Y solo se necesitan un par de brochetas largas o palillos asiáticos, los típicos chopsticks con los que también se sirven ahora los pokes. En su defecto, podemos apañarnos con pajitas metálicas, de cartón o bambú.

Como explican en ATK, tan solo hay que situar dos palitos paralelos en el centro de un plato que tenga los bordes ligeramente elevados -casi todos los platos son así-, con la separación ajustada al tamaño del sándwich o tostada que vayan a sostener. Colocando el pan encima, el aire circula por debajo, no hay condensación, y no se humedece. Se mantendrá crujiente, y si hay chorreo de salsa o queso, caerá al plato sin pringar el pan.

Si se van a servir muchas tostadas calientes o sándwiches para una fiesta o reunión familiar, siempre podemos optar por una rejilla de enfriamiento o de horno, otro buen recurso cuando hacemos tanda de tortitas y no queremos que se reblandezcan al apilarlas.

Rpanle Palillos Japoneses, 5 Pares De Palillos Naturales Lavables Reutilizables Palillos de Madera con Lujosa Caja Hecha A Mano Negra (Nature)

Fotos | Victoria Alexandrova - Seriously Low Carb - Freepik
En DAP | Las 24 mejores recetas de sándwiches
En DAP | El truco infalible para revivir el pan de ayer que triunfa en TikTok (pero que casi es más viejo que el propio pan)

Ver todos los comentarios en https://www.directoalpaladar.com

VER Comentarios

Portada de Directo al Paladar