Cuando esas tardes de invierno que entres en un antojo de dulce irrefrenable te preguntes, ¿preparé un brownie o unas cookies de chocolate? Y la duda ante tanta delicia se siembre en tu cabeza y no te deje escoger, no lo pienses más, prepárate una brookies y asunto solucionado.
Esta audaz combinación mezcla de jugoso brownie con crujiente cookie de pepitas de chocolate es solamente para los golosos más exigentes, aquellos que el día que quieren dulce lo quieren todo. A mí me pasa ¿y a ti?
Comenzaremos haciendo el brownie, para eso fundiremos en un bol el chocolate troceado y la mantequilla en trocitos en el microondas. Añadimos los huevos, removemos. Echamos la harina. La sala, el azúcar y las nueces troceadas. Vertemos la masa en un molde de unos 20 por centímetros forrado con papel antiadherente. Reservamos. Precalentamos el horno a 180 grados.
Para hacer la masa de cookies, en un bol batimos la mantequilla con el azúcar. Añadimos el huevo. Seguidamente la harina, la sal y la levadura. Por último las pepitas de chocolate.
Repartimos trozos de esta masa por toda la superficie del brownie. Hornear durante 25 minutos a 180 grados. Cortar en porciones.
Con qué acompañar los brookies
Una vez que probéis los brookies caeréis rendidos a sus encantos, aunque eso si, si por separado ya hay que consumirlos con moderación, ya no os quiero ni contar cuando se juntan qué pasa. Brookies, una tentación a la que hay que sucumbir.
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