Cuenta con más de un millón y medio de seguidores en Instagram, y echando un rápido vistazo a su galería es fácil descubrir por qué. Detrás de @naturally.jo está Jose, un joven vegano que con apenas 18 años es capaz de crear maravillas golosas inspiradas en distintas temáticas. Sus piezas dedicadas a Halloween son auténticas obras de arte comestibles, siempre bajo su peculiar estilo personal, adorables pero sin renunciar a ese toque spooky o tenebroso de la Noche de Brujas.
Smoothie bowls de otro mundo
Aunque también hace tartas y pasteles increíbles, muy llamativos son los smoothie bowls cremosos que corona con decoraciones comestibles para ofrecer diseños temáticos elegidos con muy buen gusto. Sorprenden primero por el colorido de los propios batidos, con una textura muy melosa y suave en la que no utiliza productos lácteos, puesto que es vegano.
Los modelos de Halloween presentan las típicas tonalidades de esta festividad, con colores naranjas, malvas y negros, pero también dejando hueco a colores como el rosa, según el diseño completo de cada creación. Porque Jose es un verdadero artista que sabe cómo combinar tonos de forma armónica, y también reparte los toppings con equilibrio, sin saturar, siempre sacando partido a cada elemento.
Suele dar gran protagonismo a las frutas, como moras o fresas, mirando más allá de su forma natural para sacar figuras o personajes a los que termina de dar vida añadiendo diferentes elementos, empleando, sobre todo, chocolate negro o blanco, tanto en versión fundida para dibujar como en variedades de modelaje.
Sus creaciones beben mucho del estilo kawaii japonés, personajes simpáticos, monos y adorables, con un cierto toque naîf ingenuo y muy colorista, pero también sabe dar algo de miedo cuando reproduce con asombroso naturalismo la figura del payaso Pennywise de IT.
Aunque el hecho de que sus dulces creaciones sean veganas no quiere decir que sean más o menos saludables, sí que este joven artista procura emplear ingredientes naturales, buscando esos colores sin tener que recurrir a los típicos colorantes artificiales de repostería.
La base casi siempre parte de plátano congelado más otros ingredientes según el color deseado, salvo en el caso de los smoothie bowls anaranjados, que recurre únicamente al mango. Fresas, frambuesas, té matcha, spirulina en polvo, remolacha, arándanos... jugando con ingredientes de colores fuertes consigue crear una gama de tonos muy vistosos.
Batidos terroríficamente apetecibles
El formato de smoothie bowl se presta de maravilla para jugar usando la base cremosa como un lienzo en blanco que llenar de diseños y personajes, pero también este joven suele maravillar con sus artísticos batidos o smoothies para beber, ya sin cuchara, aunque también con diferentes coberturas.
Siempre fiel a su estilo, sin saturar demasiado con exceso de componentes, sabe muy bien cómo elegir los vasos y tazas para que cada pieza luzca perfecta en su temática, añadiendo pequeños detalles decorativos en el propio recipiente. Y sabe que al presentarlos por parejas o pequeños grupos, el efecto llamativo se multiplica.
Además de las típicas imágenes icónicas que todos asociamos a Halloween (jack-o'-lantern, fantasmas, vampiros, el monstruo de Frankenstein, zombies...), este artista siente debilidad por el universo Disney, y muchos de los villanos más clásicos de sus películas son perfectos para trasladar a la festividad del 31 de octubre, como esta pareja de batidos con la mítica Úrsula de La Sirenita luciendo dulces tentáculos de chocolate.
Tentaciones que da pena devorar
También de Halloween encontramos dulces en formato individual, ya más destinados a una merienda, postre o fiesta en casa con los niños, que suelen tener menos remilgos a la hora de devorar obras de arte comestibles tan adorables como estas.
Mini dónuts, pequeños helados o brochetas se convierten en pequeños personajes totalmente vestidos para la ocasión, demostrando que sabe sacar el máximo partido del chocolate derretido en sus decoraciones.
Como vegano, Jose no puede utilizar ingrdientes típicos de estos productos como son la nata, la mantequilla o los huevos. En su lugar suele partir de una crema elaborada con anacardos, previamente hidratados, triturados con leche y aceite de coco.
Esta alternativa vegetal a la nata se presta muy bien para teñirla de colores al combinarla con cúrcuma, té matcha, polvo de remolacha, espirulina, etc. Después solo queda usar moldes adecuados, añadir coberturas de chocolate negro o blanco, y los detalles decorativos que normalmente también prepara con chocolates fundidos o modelados.
Más sencillos y sanos son estos monstruitos en los que simplemente ha sabido cortar las frutas con estilo, añadiéndoles pequeñas decoraciones con chocolate negro y blanco, pero logrando un efecto grupal muy vistoso al recurrir al pequeño formato y colocando las piezas junto a la sandía que evoca la típica calabaza de Halloween.
Como colofón, de nuevo nos seduce y asusta un poco la fantástica tarta tipo pie americana rellena de fresas, con esa cobertura que reproduce a la perfección la imagen del terrorífico payaso de Stephen King, en su última encarnación de las películas más recientes.
No se trata solo de tener arte y maña a la hora de recortar la masa y dar forma a los dibujos, también hay que saber qué personajes o figuras elegir para que puedan trasladarse bien a cada formato comestible. En el caso de este joven artista, está claro que domina tan bien el chocolate como la masa de sus tartas.
Fotos | J o s e
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