Los dos trucos de Dani García para hacer un huevo frito perfecto

Algunos de los platos más célebres de Dani García son pura alta cocina, refinada y a veces algo pretenciosa, y a pesar de todo el cocinero malagueño sigue rindiéndose ante los platos más de andar por casa, como son unos buenos huevos fritos. Podrán ser simples, pero no siempre es fácil cocinarlos a la perfección, por lo que el chef andaluz tiene un par de trucos que nos ayudarán a clavarlos siempre.

Si bien es cierto que en cada casa pueden gustarnos los huevos fritos de maneras diferentes, por ejemplo con o sin puntilla, lo importante es que el huevo no se rompa, no se pase ni quede aceitoso e indigesto. Además de usar buena materia prima, una buena sartén y aplicar el truco para que la espátula no se pegue, el triestrellado chef marbellí nos recomienda aplicar dos simples pasos para cocinar un huevo frito perfecto, a nuestro gusto.

Dos trucos de Dani García para cocinar huevos fritos

Al cocinero y empresario le gusta añadir un huevo frito a su sándwich club, y para ello deja el cocinado del mismo para el final, con el emparedado ya prácticamente terminado de montar. Entonces rompe el huevo para abrirlo en un pequeño cuenco, y así poder manejarlo mejor, evitando que se nos rompa al echarlo directamente a la sartén. Y podemos localizar posibles trocitos de cáscara que a todos se nos han colado alguna vez.

Mientras la sartén va cogiendo temperatura calentando el aceite de oliva virgen extra, el primer truco del chef es salar la yema. Este gesto, que reconoce que probablemente lo hagamos de manera casi instintiva o automática, recalca que no deberíamos saltárnoslo nunca, pues la sal comienza a encurtir ligeramente la yema y, al curarse un poco, no solo obtendremos más sabor, también una mejor textura al volverse menos frágil.

El segundo truco que comparte con nosotros es cocinar primero solo la clara. Dani García vierte con cuidado directamente la clara sobre el aceite caliente, levantando, procurando que la yema se quede en el cuenco. Con un movimiento circular agarrando el mango de la sartén, fríe la clara a potencia media para que no llegue a generarse puntilla ni se pase antes de tiempo.

Una vez con la clara ya blanca, coloca la yema directamente encima, ayudándose con la espátula engrasada para mantenerla en el centro. Entonces continúa la cocción unos pocos instantes más antes de sacar el huevo completo con la misma espátula.

En este caso el cocinero malagueño dispone el huevo frito dentro del sándwich, dejando la yema cremosa, casi líquida, asomando por un agujero hecho en el pan, cuya tapa usa para mojar en ella. Pero podemos aplicar la misma técnica a cualquier plato que queremos servir con el huevo o más huevos fritos, un alimento perfecto para convertir todo tipo de preparaciones en una comida mucho más completa, como un pisto manchego o el exótico bibimbap coreano.

Fotos | Natham Dumlao - viviflorthomaz
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