Si estás pensando en crear un dulce o un postre sano para estas fiestas, os damos la idea de utilizar frutos rojos, pues se trata de ingredientes ideales para sumar nutrientes esta temporada, además de dar mucho color y sabor a los platos.
Frutos rojos, nutricionalmente densos
Ya hemos dicho que una buena alternativa para comer más sano es contar los nutrientes que hay en los alimentos que consumimos, y los frutos rojos, concentran variedad de vitaminas, minerales y otros compuestos que pueden beneficiar la salud del organismo.
Es decir, los frutos rojos son alimentos de alta densidad nutritiva que pueden ayudarnos a enriquecer la calidad de nuestros platos.
En las fresas, grosellas, arándanos, frambuesas, cerezas y demás frutos rojos, podemos encontrar además de un intenso color y mucho sabor, un alto porcentaje de vitamina C, así como carotenos y vitamina E con función antioxidante.
También son buen fuente de flavonoides que se han asociado a beneficios cardiovasculares y a menor riesgo de sufrir cáncer en diferentes estudios.
Asimismo, los frutos rojos o frutos del bosque, son fuente de calcio, potasio y vitaminas del complejo B y poseen alto contenido acuoso y bajo aporte calórico, por lo que resultan ideales para quienes buscan cuidar la salud y comer sano para perder peso.
Como podemos ver, estos pequeños frutos tan atractivos a la vista y tan sabrosos para el paladar, son nutricionalmente densos y tienen mucho para ofrecer si los incluimos en nuestros platos.
Ideas para sumar frutos rojos a nuestros platos
En esta temporada podemos encontrar fresas y fresones frescos o variedad de frutos rojos congelados que podemos emplear para elaborar nuestros platos y disfrutar de los beneficios que estas pequeñas frutas tienen para ofrecer.
Algunos ideas para utilizarlos en la cocina son:
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Como salsas para carnes, por ejemplo, redondo de ternera con frutos rojos o pechugas de pollo rellenas con salsa de frutos del bosque.
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En postres varios como puede ser una compota de frutos rojos con queso fresco o panacotta de yogur y grosellas.
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En ensaladas frescas como guarnición o entrantes de una comida completa, por ejemplo, ensalada de mango, jamón y frutos rojos o ensalada ligera de mango y arándanos.
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Como parte de dulces y mermeladas, podemos elaborar una mermelada al horno de frutos rojos y usar esta preparación para glasear tartas o decorar otro tipo de platos dulces.
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En bizcochos o pasteles podemos incluir frutos rojos, por ejemplo, kolache de frutos rojos o bizcocho de frutos rojos.
Como se puede ver, los frutos rojos admiten muchas posibilidades de inclusión en nuestros platos y son una excelente alternativa para sumar nutrientes esta temporada.
Combinan muy bien con carnes y quesos, aunque también son un ingrediente ideal para decorar, dar sabor y color a muchos postres, pasteles y demás preparaciones semejantes, por lo tanto, no podemos dejar de incluirlos a nuestras recetas si buscamos incrementar los nutrientes de las mismas.
Y tú, ¿cómo incluyes frutos rojos en tus platos?
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