Un dulce en Nueva York. Libro de recetas

Si me preguntaran cuál es el dulce típico que podría tomar en Nueva York se me vendrían a la cabeza unas cuantas especialidades genuinamente norteamericanas, carrot cake, cheesecake, pancake y muchos más dulces acabados en “cake” que relacionamos automáticamente con lo más dulce de las pastelerías neoyorkinas.

Esa es la esencia del libro que os muestro hoy, Un dulce en Nueva York, hermano de la saga de libros de repostería temáticos por grandes ciudades, como el que os presenté el otro día y que trataba sobre lo mejor de la repostería londinense.

Esta obra con recetas de Marc Grossman y fotografías de Charlotte Lascève se divide en varias secciones. En primer lugar un capítulo relacionado con pasteles, clásicos como el de zanahoria que os mencionaba antes, el de queso en varias versiones, con frutas, chocolate o a la italiana, pero también pequeños pasteles como muffins, rollos de canela, tortitas y los espectaculares red velvet o bizcochos de terciopelo rojo.

Después una sección de un tipo de dulce muy americano, los cuadrados y barritas, pasteles muy cómodos pues al ir cortados en pequeñas porciones consiguen una presentación muy buena sin ser tan elaborados como una tarta.

Aquí el famoso brownie que no podía faltar, cuadrados de limón, barritas energéticas y un extraño pudin de tallarines que ya le echado el ojo para preparároslo un día de estos.

Si hay un clásico en Nueva York esas son también las cookies con pepitas de chocolate, además de otras variedades de galletas de corte todas muy apetecibles de preparar. Finaliza la obra con una sección de tartas típicas como la de manzana y la de calabaza, entre otras.

El libro de formato ligeramente apaisado presenta el texto de la receta en una cara y se acompaña cada una de una fotografía grande que nos invita a descubrir cómo finalizar nuestro dulce y su presentación. Se acompañan de ilustraciones en plumilla en negro representando escenas típicas de las pastelerías neoyorkinas.

Cada receta trae su explicación dividida en varias secciones, tantas como proceso tenga la tarta o el pastel que vayamos a preparar, así se divide en como hacer la masa, la elaboración, la cocción o el glaseado por poneros un ejemplo. Esto hace que no se haga tedioso el proceso y que con un golpe de vista distingamos los pasos que va a llevar nuestra preparación.

En resumen un libro muy interesante si os gusta la repostería internacional y en este caso neoyorkina, con lo mejor del dulce de esta ciudad para degustarlo en nuestra casa.