Mitad 'tupper', mitad bolsa zip: el invento definitivo para llevar la comida al trabajo sin manchar bolsos o mochilas

Los tuppers tradicionales fueron un gran invento que revolucionó la manera de comer de millones de personas, sobre todo trabajadoras, aparte de ser también una magnífica solución al almacenamiento de las sobras.

Pero también este invento ha tenido su propia evolución a través de los tiempos y nuevas variaciones ahora sugieren nuevos usos y posibilidades de uno de los gadgets de cocina más prácticos donde los haya.

Se trata de los tuppers con cierre ziploc que permiten almacenar los alimentos de una manera también muy práctica y especialmente pensada para aquellos que incluyen jugos.

Los tuppers de este estilo son bolsas generalmente de silicona de uso alimentario, en las que los alimentos se conservan en su interior en posición de pie, de manera que no se derraman tan fácilmente como en los tupper tradicionales, donde es dificil que sopas y cremas salgan indemnes.

Asimismo, se pueden usar también con alimentos sólidos sin problema, siendo su ventaja que son más fáciles de transportar de pie dentro, por ejemplo, de tote bags, mientras se va en metro de casa al trabajo.

En cambio, los tuppers tradicionales no resultan muy cómodos por sus formas cuadradas y rectangulares para transportar de pie y a menudo acaban volcados o, lo que es peor, o posándose sobre un lateral con toda la comida ladeada.

Igualmente, su almacenamiento en la nevera es de lo más cómodo, pues no ocupan tanto espacio horizontal, aunque también es cierto que estos no se pueden apilar como los tuppers de siempre.

Evidentemente, como los otros tipos de tupper, se trata de unos formatos totalmente reutilizables, que, no obstante, no pueden ponerse en el lavavajillas para su limpieza para proteger el cierre de la cremallera.

Como soportan muy bien el calor, también pueden meterse en el microondas para calentar la comida sin problemas.

Por otro lado, el cierre hermético en zip es de lo más fácil de usar, mucho más que las tapas que a menudo no cierran y que requieren de cierta fuerza para bajar sus pestañas.

Otra de las ventajas de estos tuppers es que pueden usarse transitoriamente como bolsas de almacenamiento, y contribuir al cuidado del medio ambiente al olvidar para siempre las bolsas de plástico desechables que tanto contaminan.

Esta ventaja se extiende a los congelados, pues pueden meterse en el congelador sin problemas y usarse para guardar cualquier tipo de alimento.

Fotos | Amazon

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