Para elaborar una taza de café es necesario un largo proceso desde el cultivo de la planta hasta su comercialización. El café es la semilla del fruto del cafeto, cuya parte exterior, conocida como "cereza", se desecha, generando enormes cantidades de residuos. Ahora parece que esas sustancias podrán ser aprovechadas en un producto supuestamente revolucionario tanto a nivel económico como gastronómico: la harina de café.
La compañía CF Global ha creado Coffee Flour, que todavía está dando sus primeros pasos, al desarrollar un método para aprovechar los desechos en la obención del grano de café y convertirlos en una harina muy nutritiva y versátil. Además, apuestan por que esta emergente producción beneficie a los agricultores y recolectores de café, así como al medio ambiente.
El mundo del café mueve millones pero los trabajadores de las etapas de cultivo y recolección soportan duras jornadas para recibir sueldos muy bajos, en unas condiciones laborales muy inestables. Con la línea de producción que abre Coffee Flor, esperan crear puestos de trabajo más justos, consiguiendo al mismo tiempo disminuir la contaminación derivada de los desechos de los frutos del café.
En cuanto a los aspectos nutricionales, sus responsables aseguran que la harina de café presenta muchas ventajas. Tiene más fibra que el trigo integral y es rica en proteínas, hierro, potasio y es naturalmente libre de gluten. Además, al parecer los niveles de cafeína son muy reducidos, y el sabor a café muy tenue, casi imperceptible. En realidad, apuntan a que esta harina deja notas afrutadas y cítricas.
La harina de café se puede utilizar como cualquier otra harina, considerando que no tiene gluten. Imagino que sus usos pueden ser similares a los de la harina de castaña, plátano o coco, pudiendo usarse sola en recetas de pasta o algunas galletas, o combinada con otros cereales. En Coffee Flour cuentan con la colaboración de algunos cocineros que ya están desarrollando recetas con esta harina, por ejemplo pasta, granola o galletas.
Como apasionada el café y aficionada a probar productos nuevos, me atrae mucho esta idea de la harina de café. Si además su producción conlleva ventajas socioeconómicas y ambientales, y posee propiedades nutricionales beneficiosas, se presenta como un producto realmente interesante. Habrá que esperar para ver cómo evoluciona el proyecto de Coffee Flour y si realmente se convierte en un nuevo producto revoluionario.
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