Ya os hablamos el año pasado de cómo se desarrollaron las finales de las World Class Competition 2013 y en este año hemos querido volver a presenciar un proceso tan interesante con el que tomar el pulso a la coctelería, un campo en auge, en el que los bartenders españoles están cada vez más altos en el panorama internacional. Por eso, el pasado día 26 asistimos a una de las rondas clasificatorias del World Class Competition de cóctelería de Diageo para ver cómo estaba el nivel este año.
La sesión tuvo lugar en el Gourmet Experience de El Corte Inglés de Callao donde los diez participantes, fueron realizando sus presentaciones de coctelería clásica uno a uno frente a la pareja de jueces, y ante la expectación del numeroso público presente en el espacio. Y realmente, la sesión mereció la pena.
Como indicaron los jueces al terminar la ronda, es innegable el talento y la creatividad de los participantes, destacando el altísimo nivel que tienen los bartenders españoles y el gran futuro que tienen en esta disciplina tanto por la calidad de sus elaboraciones, como por sus presentaciones, parafernalia y -por qué no decirlo--, también por su capacidad de crear un auténtico show.
Ya os explicaba el año pasado que en este tipo de concursos se puntúan numerosos aspectos, tales como la calidad del cóctel, teniendo en cuenta tanto el respeto al cóctel original como las posibles innovaciones o capacidad creativa y variaciones sobre el mismo. También es importante el conocimiento de los productos premium utilizados en las explicaciones que el barman debe dar sobre los ingredientes.
En esa materia, el cliente de coctelería quiere una atención esmerada, espera una conversación educada y continua, y confía en pasar un buen rato, por lo que la capacidad de expresión del bartender y su simpatía y elocuencia son muy apreciadas. Además, ciertas dotes teatrales para enmarcar su presentación, contribuyen al éxito.
En esta faceta, los diez participantes ilustraron con su creatividad y presentación una gran capacidad creativa y de performance, utilizando todo tipo de elementos, accesorios e indumentarias, así como otros elementos idóneos para la presentación de los cócteles, muchas veces elaborados o diseñados por ellos mismos.
Desde los bartenders más clásicos con chaleco y pajarita, al smoking de James Bond, la indumentaria de un irlandés recién emigrado a los Estados Unidos o un ropaje de la era post-industrial que recordaba a los conciertos de los míticos Aviador Dro o incluso a los británicos Devo, todo vale para impresionar al jurado.
Cócteles servidos en balas de plata, pequeñas piñatas a escala que esconden el "dressing" de la copa, platos y vasos de metal propios de los obreros del siglo 19 o cúpulas de caramelo agujereadas en el momento para llegar al cóctel fueron algunas de las estrategias utilizadas por los participantes en la ronda.
Los productos que usaron para los cócteles, eran destilados premium de diversas marcas, con los que se elaboraron e interpretaron, los distintos cócteles clásicos o sus versiones. Así vimos variaciones sobre el Dry Martini, el Julep, Ponche y otras interesantes combinaciones entre las propuestas.
Tras una votación ajustada en la que el ganador se decidió por un margen de medio punto, se alzó con el premio pasando a la siguiente ronda el Silver Bullet interpreatdo por Andrian Sehob, que con su presentación impecable vestido de James Bond, aromatizando la bebida con una pistola de agua y sacando la ginebra de un bloque de hielo que portaba en un maletín al que venía esposado, conquistó al jurado.
Próximamente habrá más sesiones y rondas como esta en diversas zonas de España, hasta llegar a la gran final de 2014, en la que deseamos mucha suerte a todos los participantes. Definitivamente el mundo de la coctelería está en auge y con este tipo de eventos, se acerca más al gran público.
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