Nunca dejo de sorprenderme con la versatilidad de la comida a la hora de desarrollar la creatividad más artística, incluso con ejemplos tan sencillos como el que os enseño hoy. Yeirkif Abdullah crea divertidos dibujos jugando con tazas de café y galletas Oreo, usando sus formas redondas para superponerlas a diferentes ilustraciones.
Como ya he comentado, la idea es muy simple y los dibujos son esquemáticos y sencillos, siempre en blanco y negro, pero el resultado final sorprende por lo acertado de la propuesta y el efecto tan simpático que causa en cada obra. Una humilde taza blanca de café solo y unas galletas abiertas demuestran dar mucho juego bajo las manos de una mente creativa como la de este autor.
Abdullah es un joven artista especializado asentado en Kuala Lumpur que trabaja como fotógrafo en su estudio Paperbag, pero parece que le gusta experimentar con otras técnicas, sintiéndose especialmente atraído por la ilustración. Siempre ha realizado muchos bocetos, esbozos y garabatos sencillos a mano, hasta que un día descubrió que la taza de café que le acompaña por las mañanas podía jugar su papel en esos dibujos.
Así ha comenzado recientemente a crear pequeñas obras que fotografía y cuelga en su cuenta de Instagram donde las comparte antes de pasarlas a su galería online. Pronto se ha ganado cientos de seguidores, y es que sus dibujos resultan de lo más simpáticos y creativos, a pesar de ser en realidad muy sencillos. Quizá en la simpleza de sus trazos y ese espíritu de juego sin mayores pretensiones esté la clave de su éxito.
El artista elabora sus dibujos con tinta negra sobre papel blanco, y después coloca encima una taza de café o unas galletas Oreo abiertas, jugando con las formas redondas y el contraste entre blanco y negro. Al ver sus imágenes puede dar la sensación de que sus obras son muy fáciles, pero yo sé que a mí no se me ocurriría nunca nada parecido. No es tan sencillo acertar con la combinación de dibujo y objetos, pero en su caso parecen funcionar muy bien.
Yeirkif Abdullah apuesta por dibujos simples, algo minimalistas y esquemáticos, de objetos cotidianos perfectamente reconocibles, como una bicicleta o una cámara de fotos, y también con personajes de animación como Mickey Mouse o Wall-E. Y es que sus creativos dibujos con tazas de café y galletas Oreo tienen cierto aire infantil que sin embargo cautiva a cualquiera.
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