Profeco de México nos da el tip ideal para detectar plomo en las ollas de barro (y tres formas para eliminarlo)

Cocina de forma segura aplicando estos consejos para eliminar el plomo de tus ollas

En la cocina tradicional mexicana, es común utilizar elementos que, desde antaño, han formado parte de los utensilios clave para la preparación de deliciosos platillos del día a día, entre los que destacan las ollas de barro que se usan para darle un sabor excepcional a preparaciones que se realizan directamente sobre la leña, sin embargo, este tipo de utensilios pueden resultar tóxicos al contener plomo, por lo que aquí te decimos cómo detectar si contiene esta sustancia y tres formas de eliminarla para seguir cocinando de forma segura.

Es importante tener en cuenta que el plomo es un metal tóxico que puede ser muy peligroso para la salud, especialmente para niños y mujeres embarazadas. Por ello, te compartimos el consejo que nos da la Profeco para detectar si nuestra vajilla de barro contiene este dañino material.

Para detectar plomo en las vajillas de barro, sumerge una parte (la mitad, dependiendo del tamaño de la olla o plato) en vinagre blanco, dejando reposar por 24 horas. Si pasado este tipo detectas que pierde brillo y la textura se vuelve rasposa, contiene plomo y puede derivar en problemas de intoxicación.

Método 1: Agua y ajo

  1. Sumerge la olla completamente en agua fría y déjala reposar durante 24 horas.
  2. Retira la olla del agua y sécala bien con una toalla limpia.
  3. Corta un diente de ajo por la mitad y frota la superficie interior y exterior de la olla con las mitades del ajo.
  4. Vierte 1 taza de vinagre blanco en la olla y ponla a hervir a fuego lento durante 15 minutos.
  5. Retira la olla del fuego y deja que se enfríe completamente. Luego, lávala con agua caliente y jabón como lo harías normalmente.

Método 2: Leche

  1. Vierte leche fresca en la olla hasta cubrir completamente el fondo.
  2. Pon la olla a fuego lento y deja que la leche hierva durante 30 minutos.
  3. Retira la olla del fuego y deja que se enfríe completamente. Luego, vacía la leche y lava la olla con agua caliente y jabón como lo harías normalmente.

Método 3: Bicarbonato de sodio

  1. En un recipiente aparte, mezcla 2 cucharadas de bicarbonato de sodio con 1 taza de agua hasta formar una pasta.
  2. Frota la superficie interior y exterior de la olla con la pasta de bicarbonato de sodio.
  3. Deja que la pasta de bicarbonato de sodio repose en la olla durante 24 horas.
  4. Enjuaga la olla con agua caliente para eliminar la pasta de bicarbonato de sodio.

Con estos sencillos trucos, verás como es más seguro utilizar tus ollas y utensilios de barro para no poner en riesgo la salud de tu familia al preparar ricos guisos.

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