Tendemos a pensar que la repostería integral o rica en cereales y fibra suele ser seca o sosa, pero solo hay que saber combinar los demás ingredientes para evitarlo. Este bizcocho integral jugoso con fruta aprovecha el poder hidratante y el sabor de las frutas para conseguir una miga tierna y húmeda.
No os asustéis con la lista de ingredientes tan larga, pues resulta extremadamente sencillo prepararlo, tanto que no necesitáis ni una batidora. Así que ahora ya no hay excusa para incorporar fibra en nuestra dieta y es ideal para un desayuno o una buena merienda ocasional.
Comenzaremos precalentando el horno a 180ºC. Engrasar un molde de 20 cm de diámetro con mantequilla y espolvorear con una cucharadita de harina sacudiendo el exceso.
En un bol mezclar los huevos batidos, el yogur, el aceite, el puré de manzana, el plátano machacado y la miel. Unir todo bien con unas varillas hasta formar una mezcla sin grumos.
En otro bol mezclar la harina integral, la levadura, la canela, los arándanos frescos y los copos de avena, reservando una cucharadita para espolvorear por encima. Verter los ingredientes húmedos sobre los secos y mezclar con una espátula sin sobrebatir.
Verter la mezcla en el molde, espolvorear con las semillas y los copos de avena la superficie de la masa y hornear durante 45 minutos.
Con qué acompañar el bizcocho
El bizcocho integral jugoso con fruta creo que puede convertirse en la estrella de vuestros desayunos, siempre de forma ocasional. Podemos tomarlo con café, té, una infusión aromática, leche o bebida vegetal.
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