Pasearse por Instagram puede saturar cuando tu feed está lleno de imágenes de comida, pero a veces hay flechazos instantáneos. Cuando Isabel Pérez compartió la receta del que decía ser uno de los bizcochos favoritos de su hijo, los dedos se fueron solos para guardarla, y pacientemente esperó unas semanas hasta que un antojo de chocolate fue a rescatarla. La hemos modificado un poco para que sea un bizcocho de cacao sin gluten, y es que todos los amantes del cacao se merecen disfrutarlo.
La maizena deja una textura algo diferente a la harina de trigo, pero como buscamos una miga muy jugosa y húmeda, nos pareció ideal para lograr una alternativa sin gluten accesible para todo el mundo. Como bien señala su autora original, no tiene textura de brownie en absoluto, es un bizcocho esponjoso y de sabor intenso, ya que no usamos chocolate sino cacao, y el queso crema de untar enriquece y otorga más jugosidad al conjunto.
Según el tipo de cacao que tengas en casa te podrá salir con un color más intenso o un sabor ligeramente distinto, como explicamos aquí. Sea como sea, utiliza el que te guste, siempre que sea 100% cacao sin azúcares, sin edulcortantes y sin almidones o aromas añadidos.
Si es posible, dejar atemperar fuera de la nevera los huevos y el queso crema. Precalentar el horno a 180ºC con calor arriba y abajo, y forrar un molde rectangular de unos 20 cm, o engrasar con aceite y enharinar.
Batir los huevos unos minutos con el azúcar en un recipiente profundo, mejor con batidora de varillas. Batir un poco aparte el queso crema, escurrido del líquido que pueda llevar, para ablandarlo, y añadir. Batir hasta incorporar y echar el aceite y la vainilla, batiendo un poco más.
Mezclar aparte el cacao con la maizena, la levadura y la sal, e incorporar poco a poco a la masa principal pasando todo por un tamiz o colador. Batir finalmente a velocidad baja para obtener una masa homogénea, y llenar el molde.
Hornear duante unos 45 minutos, comprobando el punto. Si se quiere esa jugosidad interior, vigilar bien que no se pase. Al enfriarse se pondrá más firme. Esperar un poco fuera del horno, desmoldar y dejar enfriar sobre una rejilla.
Con qué acompañar el bizcocho de cacao sin gluten
La intensidad profunda chocolatosa de este bizcocho pide un vaso de leche o bebida vegetal bien fría (o caliente si el tiempo acompaña), aunque los amantes del café sin duda disfrutarán sirviéndose un buen pedazo con su espresso, un capuccino o un goloso suizo coronado con nata montada. También le iría bien un coulis de fruta, salsa de chocolate caliente, crema pastelera o una bola de helado.
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