En casa siempre tenemos plátanos en el frutero. Nos gustan por su sabor, su valor nutricional y por lo fáciles y cómodos que son de comer. Sin embargo no siempre podemos dar cuenta de ellos tan rápido como debiéramos y terminamos con plátanos maduros que nadie quiere comer. Menos mal que hay maneras de aprovecharlos y esta receta de flan de plátano es una de ellas.
Es tremendamente sencilla de preparar y siempre sale bien. Por eso la repetimos una y otra vez y no nos cansamos de ella. El flan de plátano está mucho más rico frío, recién sacado de la nevera. Evitad la tentación de meterle mano antes de tiempo. ¿Seréis capaces?
Precalentamos el horno a 180º C, con calor arriba y abajo.
Calentamos la leche con el azúcar y le añadimos la piel del limón. Cuando alcance el punto de ebullición, retiramos y dejamos atemperar unos minutos. Mientras tanto pelamos los plátanos, los machacamos con un tenedor dentro de un cuenco amplio. Añadimos una cucharada de zumo de limón, los huevos y batimos hasta homogeneizar.
Poco a poco agregamos la leche, pasándola por un colador y removiendo al mismo tiempo. Cubrimos la base de las flaneras con un poco de caramelo, rellenamos con la mezcla del flan y cocemos en el horno durante 18-20 minutos o hasta que estén firmes. Dejamos enfriar, mejor si es en la nevera, antes de desmoldar y servir.
Con qué acompañar el flan de plátano
Podemos tirar por lo clásico y tradicional y acompañar el flan de plátano con un poco de crema chantilly o nata montada azucarada, una bola de helado y unos trozos de fruta fresca. No obstante a nosotros nos gustan tal cual, sin florituras. No necesita de nada más que ganas de disfrutar de un bocado dulce y listo.