Si realmente queréis sorprender a vuestros comensales con un exquisito postre, os recomiendo estos hatillos de chocolate con zanahorias caramelizadas, como podéis ver en la foto solo la presencia es de lo mas tentadora y en el paladar es una explosión de sabor que seguro no dejará indiferente a nadie, probadlo y nos contáis.
Ingredientes: 4 hojas de pasta brick, 1 manojo de minizanahorias, azúcar, agua y cacao en polvo (opcional). Para la trufa: 150 gramos de chocolate con un 71% de caco, 150 centilitros de nata líquida y unas gotas de Grand Marnier.
Preparación: Para la trufa, ponemos el chocolate a fundir a baño maría, añadimos unas gotas de licor y lo mezclamos suavemente incorporando poco a poco la nata, un poco caliente, sin dejar de remover, hasta que quede bien mezclada con el chocolate. Ponemos todo en un molde o en una cubitera, deben de salir cuatro trufas, lo dejamos enfriar, desmoldamos y lo ponemos a congelar. Esto es muy importante porque si no lo congelamos se corre el peligro de que el chocolate sobresalga de las pasta brick.
Pelamos las zanahorias y las partimos por la mitad. Preparamos un almíbar con el mismo peso de azúcar que de zanahorias y la mitad del peso de agua. Ponemos las zanahorias, el azúcar y el agua en un cazo en el fuego para confitar a fuego lento hasta que las zanahorias queden caramelizadas; cuando así sea, las escurrimos y reservamos.
Estiramos la pasta brick, ponemos una trufa y dos trozos de zanahoria y la envolvemos en un hatillo, pinchamos las dos puntas con un palillo para que no se deshagan cuando se cuezan. Colocamos los hatillos 10 o 12 minutos en el horno, a 200 ºC, hasta que queden dorados, podemos pincharlos para verificar que el chocolate se ha fundido, les sacamos los palillos y los servimos acompañados por un par de minizanahorias y cacao en polvo.
Si queremos darle mas categoría a este postre, podemos servirlo sobre un lecho de crema inglesa.
