A pesar de que defiendo que los helados se pueden disfrutar todo el año, es en verano cuando viven su momento de gloria. Desde pequeña siempre recuerdo hacer helados caseros congelando los yogures o con polos de horchata, limonada y leche con cacao. Ahora tengo una máquina heladera pero me he vuelto casi adicta a preparar versiones facilísimas congelando fruta, y este helado cremoso de plátano con dos ingredientes es mi favoritísimo.
Hace ya unos años que descubrí por primera vez lo sencillo que es preparar helados caseros instantáneo simplemente congelando y triturando plátano maduro. Pues ahora la “receta” sube un peldaño más añadiendo tan solo otro ingrediente: la mantequilla o crema de cacahuete. Una pequeña porción de este energético producto puede hacer maravillas en multitud de elaboraciones, pero intentad usar una variedad que sea 100% fruto seco, sin más añadidos.
Lo primero es disponer de plátanos maduritos, que empiecen a estar ya rozando el límite para comerlos al natural, algo blandos al tacto y con muchas manchas en la piel por fuera. En realidad podemos dejar que maduren aún más, estarán aún más dulces y con más aroma. En la imagen se puede ver que yo tenía en el congelador plátanos de estados diferentes, no importa mucho si se mezclan.
Pelar y cortar en rodajas. Congelar en una bolsa de congelación o un recipiente hermético durante al menos dos horas. Pasado ese tiempo, colocar en el vaso de una buena batidora o usar una picadora o procesador de alimentos. Empezar a triturar a alta velocidad en rachas cortas de tiempo, removiendo bien de vez en cuando para evitar que se pegue, hasta tener una textura ligeramente cremosa.
Añadir en ese momento la mantequilla o crema de cacahuete y volver a triturar todo junto, hasta conseguir la textura cremosa y homogénea deseada. Se puede servir directamente o devolver al congelador en un recipiente hermético para que se solidifique un poco, entre 30 minutos y 1 hora.
Con qué acompañar el helado de plátano
Las medidas de este helado cremoso de plátano son aproximadas, se puede añadir más crema de cacahuete al gusto o usar más cantidad de plátano. Podemos servirlo tal cual o añadir chocolate, fruta fresca, crocanti de avellana o de almendra, coco rallado o lo que se nos ocurra. Es perfecto para reponer energías a media tarde cuando más aprieta el calor, y me parece un capricho perfecto especialmente si somos deportistas.
En DAP | Helado de vainilla
En DAP | Helado de fresas