Me ha vuelto a pasar. El día que horneé este pastel de chocolate y avellana sin gluten tenía pensado hacer otro bizcocho, pero me encontré con esta receta y cambié de idea al instante. Y no me arrepentí, el pastel fue todo un éxito y no duró mucho en casa. Con harina de alforfón y la avellana molida, es un dulce ideal para celebrar el Día Nacional del Celíaco.
La combinación del fruto seco y el trigo sarraceno o alforfón, sin gluten, hace una gran pareja con el chocolate negro en este pastel. Hay que procurar batir bien las claras de huevo ya que evitarán que la miga sea un mazacote, y aunque no es tan esponjoso como otros bizcochos tiene un interior suave, ligeramente húmedo y no demasiado dulce.
Precalentar el horno a 180ºC y engrasar o forrar con papel sulfurizado un molde redondo. Trocear el chocolate negro y derretir en un recipiente al baño maría. Dejar enfriar ligeramente y añadir el aceite, mezclando con unas varillas.
Separar las yemas de las claras de los huevos. Batir las yemas en un recipiente mediano junto con la mitad del azúcar. Agregar el yogur, la esencia de vainilla y el chocolate, mezclando bien. Incorporar la avellana molida, la harina de trigo sarraceno, la sal, el bicarbonato y el café.
Batir aparte las claras de huevo hasta que empiecen a estar montadas, añadir el resto del azúcar y continuar batiendo hasta que formen picos sólidos. Echar 1/3 sobre la masa, mezclar suavemente y añadir el resto. Mezclar con una lengüeta siguiendo movimientos envolventes.
Llenar el molde con suavidad, igualar la superficie con la lengüeta y hornear durante unos 30-35 minutos, hasta que al pinchar el centro con un palillo salga prácticamente limpio. Esperar unos minutos fuera del horno antes de desmoldar y dejar enfriar completamente sobre una rejilla.
Con qué acompañar el pastel sin gluten
Este pastel de chocolate y avellana sin gluten tiene un gran sabor a chocolate sin ser demasiado dulce, por lo que es perfecto para disfrutar casi a cualquier hora del día. Si sois muy golosos, añadid una cobertura de chocolate fundido o servidlo con nata montada o mermelada de frutos rojos.