Si hay un ingrediente que nos encanta para incorporarlo a un postre son las manzanas ¡las adoramos! y si además van combinadas con una deliciosa capa de merengue, como ocurre en esta receta de pastel polaco de manzanas y merengue, entonces somos capaces de no dejar ni las migas. Os animamos a prepararlo porque seguro que os agradará tanto como a nosotros.
Lo característico de este pastel son las tres capas que lo componen. Como base un bizcocho, encima de este lleva una capa de manzanas caramelizadas y, por último, un merengue de almendras. No conocemos en profundidad la gastronomía polaca, pero os aseguramos que si todos los platos son igual de sabrosos que este postre, estamos deseando descubrirlos todos.
Empezamos batiendo la mantequilla con 100 g de azúcar, hasta que la mezcla esté espumosa. Separamos las claras de las yemas. Cortamos a lo largo la vaina de vainilla y extraemos, raspando, la pulpa, mezclamos la mitad de esta con las yemas, la leche y la mezcla de mantequilla y azúcar. Mezclamos la harina con la levadura y la maizena y la añadimos a cucharadas a la mezcla anterior.
Lavamos con agua caliente las pasas, las secamos con papel absorbente y las ponemos a remojar en el ron. Pelamos las manzanas, las partimos por la mitad, las descorazonamos y las cortamos en rodajas finas. Lavamos el limón y rallamos la piel sobre las manzanas, exprimimos el zumo y lo añadimos a las manzanas junto a las pasas remojadas, las especias y 50 g de azúcar.
Precalentamos el horno a 200ºC y untamos el molde con mantequilla. Distribuimos la masa sobre la placa y repartimos por encima la mezcla de manzanas. Horneamos durante 25 minutos. Batimos las claras con el resto de azúcar y pulpa de vainilla. Mezclamos con las almendras picadas. Sacamos el molde del horno, repartimos por encima el meregue de almendras y horneamos otros 20 minutos en la parte inferior del horno.
Con qué acompañar el pastel polaco de manzana y merengue
Este pastel polaco de manzanas y merengue es ideal para servir como postre, tras una comida especial. Aunque difiera de la receta típica, también podéis cambiar las manzanas por otra fruta, por ejemplo por fresas, que ahora están de temporada. Servid este pastel acompañado de una cucharada (o dos) de nata montada ¡estará delicioso!.