Estos pastelitos de melocotón, almendras y pistachos apenas requieren trabajo y de verdad que os van a sorprender. Son tan sencillos que podéis tenerlos listos mientras hacéis cualquier otra labor en la cocina o en la casa porque tampoco requieren mucha atención.
Además, la receta es bastante versátil porque el relleno de almendras y pistachos, lo podéis adaptar a los frutos secos que tengáis en casa, como nueces, piñones, avellanas y la fruta de cobertura puede ser el melocotón aprovechando cuando esté de temporada, o cualquier otra fruta carnosa y jugosa como por ejemplo el kiwi o la manzana.
La idea es sencilla, una base crujiente de masa de hojaldre, una capa de relleno de cualquier variedad de frutos secos que tengáis en la despensa y una fruta en la capa superior. Ya veréis cuantas posibilidades tiene.
Precalentamos el horno a 200ºC sin aire. Cortamos pequeñas obleas de hojaldre con un cortapastas. Podéis usar uno de tamaño pequeño, para que los pastelitos se puedan tomar de un bocado. Usad un cortador circular o si lo preferís, usad uno con forma de estrella, de flor o cualquiera que os guste.
Para hacer el relleno, trituramos los pistachos, almendras o los frutos secos elegidos y los mezclamos con la mantequilla fundida, la harina y el azúcar, trabajando hasta obtener una pasta similar a la que veis en las fotos. Colocamos una pequeña cucharada de este relleno sobre cada obleita de masa.
Cortamos rodajitas finas de melocotón y después las recortamos para que tengan más o menos la misma forma y tamaño que las obleas con su relleno. Cubrimos cada pastelito con el melocotón y los vamos colocando en una fuente de horno.
Horneamos durante 6-8 minutos hasta que veamos que el hojaldre de la base sube un poco y comienza a tostarse, dejando los pastelitos unos minutos en el horno apagado. Para rematar damos una pincelada de mermelada de melocotón o albaricoque sobre la fruta para que esté más jugosa y brillante.
Con qué acompañar los pastelitos de melocotón, almendras y pistachos
Estos pastelitos de melocotón, almendras y pistachos son ideales para tomar como tentempié entre horas, para acompañar un café o té a media tarde o para tomar como postre, ya que su pequeño tamaño nos hará disfrutar de sus sabores dulces sin aportar demasiados remordimientos.
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