Esta receta de coca mallorquina de tallades me la pasó una amiga de la isla vecina con la que tuve el placer de sentarme en una cena hace unas semanas y en la que acabamos, irremediablemente pues a las dos nos encanta cocinar, intercambiando recetas y anécdotas gastronómicas. Lo habitual es usar una bandeja más baja, pero me apetecía probar la cacerola de Bra para realizar una coca y el resultado ha sido estupendo.
Las tallades son las tajadas o trozos que se añaden a la masa, que tanto pueden ser dulces o saladas o incluso una combinación de ambas. Albaricoques, sobrasada o lo que se os ocurra son una excelente combinación para acompañar esta deliciosa masa. Gracias Mª Antonia, es una receta que vale la pena probar.
Calentamos ligeramente el agua y deshacemos en ella la levadura de panadería. Agregamos el resto de ingredientes (las patatas escurridas y chafadas con un tenedor) y amasamos hasta obtener una masa lisa. La harina es mejor que la vayamos añadiendo poco a poco, tal vez no será necesario añadirla toda o puede que tengamos que agregar un poco más, la cantidad es aproximada.
Hacemos una bola con la masa y la dejamos reposar una hora o hasta que doble de tamaño en un bol untado con aceite que colocaremos en un lugar cálido y sin corrientes de aire. La amasamos para desgasificar y la extendemos en una bandeja de horno. La dejaremos reposar otra hora más hasta que vuelva a doblar su tamaño.
Repartimos los albaricoques, espolvoreamos con abundante azúcar y cocemos a horno precalentado a 150ºC unos 50 minutos o hasta que la superficie quede dorada. Una vez horneada, podemos volver a espolvorear de azúcar.
Con qué acompañar la coca mallorquina de tallades
Esta receta de coca mallorquina de tallades es estupenda para la merienda. Si usáis una bandeja plana no tendrá tanta altura como la mía, y quedará un poco menos esponjosa, pero el resultado será igual de delicioso. Os animo a combinar trozos de sobrasada con los albaricoques u otra fruta, veréis como os gusta muchísimo.