Aunque por lo general las samosas son preparaciones saladas, no he podido resistirme a traeros esta versión dulce de samosas de plátanos, ron y chocolate, ideales para servir como postre en una cena de picar o para llevar a una merienda en el campo.
En esta ocasión y para que sea una receta rápida y asequible a todo el mundo aunque no estés muy preparado en cocina, la masa no es la original, sino una masa brick refrigerada que simplifica mucho el plato y así poder disfrutarlo sin muchas esperas.
Comenzaremos precalentando el horno a 190 grados centígrados con calor arriba y abajo. Pelamos los plátanos y los cortamos en rodajas, si son muy grandes partimos estas a la mitad o en cuartos.
Seguidamente ponemos una sartén al fuego y derretimos la mantequilla, añadimos las rodajas de plátano y el azúcar moreno y las salteamos durante siete minutos o hasta que veamos la fruta dorada y blanda. Añadimos el ron y le prendemos fuego con un soplete de cocina para flambear la preparación. Reservamos.
Cortamos las láminas circulares de pasta brick a la mitad, consiguiendo dieciseis medias circunferencias. Añadimos en una esquina de la pasta una parte proporcional de relleno de plátano y unas perlas de chocolate negro, teniendo en cuenta que nos van a salir dieciséis unidades. Doblamos como explico en las imágenes del paso a paso y seguidamente haciendo un triángulo, que giraremos consecutivamente conservando el relleno cerrado en el interior.
Cuando acabemos remetemos el borde sobrante de masa para cerrar nuestra samosa y la colocamos en una bandeja de horno forrada con papel antiadherente. *Horneamos durante diez minutos**.
Con qué acompañar las samosas de plátano, ron y chocolate
Las samosas de plátano, ron y chocolate se consumen calientes y recién hechas para que los ingredientes del relleno están fundidos. Si no os importan las calorías también podéis freír las samosas en aceite de girasol. Yo prefiero está versión al horno porque me resulta más ligera, pero fritas cómo suelen ser las originales, también están deliciosas.