¿Quién se acuerda de cuando se podían contar con una mano los tipos de yogur del supermercado? Hoy yogures y variantes invaden los lineales con miles de sabores y variedades, la gran mayoría cargados de azúcares o con mensajes publicitarios confusos. Yo quiero reivindicar el yogur natural, sin más, a base de leche y fermentos lácteos, una delicia que va más allá de ser postre o merienda.
El yogur está de moda por sus propiedades saludables, pero si sigue triunfando es porque gusta a mucho a grandes y pequeños. En mi casa, por la influencia centroeuropea familiar, ha sido siempre un producto básico, ya fuera casero o comprado, pero siempre natural. Merece la pena invertir en un yogur de buena calidad para degustarlo tal cual y también para sacarle partido en la cocina.
Cremas, ensaladas y aperitivos
Para empezar, prácticamente cualquier crema o sopa cremosa admite yogur entre sus ingredientes. Podemos incorporarlo a ojo a la hora de mezclar y triturar, para suavizar el sabor o sustituir la típica nata, o simplemente añadir unas cucharadas a la hora de servir. Queda muy bien tanto en platos calientes, como una crema de calabaza y zanahoria, como en preparaciones frías, por ejemplo en esta sopa fría de berros y yogur.
También es el yogur natural una buena pase para preparar salsas y dips de picoteo, presentaciones en vasitos o aliñar y complementar ensaladas. Su textura se puede combinar con otros ingredientes, como la mayonesa o la mostaza, y crear recetas de textura cremosa como la típica raita o ensalada india.
- Tarator o sopa fría de yogur y pepino: receta búlgara
- Raita de yogur y remolacha
- Crema fría de pepino, yogur griego y menta
- Crema de aguacate con yogur griego
- Carbonara vegetariana con Thermomix
- Ensalada cremosa de pepino
- Ensalada alemana de arenque y patata
- Ensalada de pepino y yogur
- Ensalada de patata con semillas, especias y yogur
- Vasitos de yogur skyr con tartar de aguacate, granada y manzana
- Vasitos de yogur griego al curry con palitos de verduras
Platos de verduras
A la hora de cocinar con verduras, el yogur nos permite añadir sabor y textura de muchas maneras diferentes, y además de forma sana y ligera. Una simple salsa de yogur bien aderezada con hierbas puede ser el complemento perfecto para unos espárragos blancos al vapor, y también se puede cocinar con ellas. Por ejemplo, el yogur y las especias transforman por completo el sabor de esta coliflor asada con especias y almendras.
- Brócoli con yogur y mostaza, receta saludable con aromas de la India
- Berenjenas al horno con salsa de yogur y granada
- Calabaza salteada con garbanzos y aliño de yogur y tajini
- Dum Aloo, curry rojo de patatas baby con yogur
- Salteado de berenjena y pimiento con salsa de yogur
- Medallones de lentejas con salsa de yogur
Carnes y aves
También las carnes se pueden acompañar con una salsa rápida casera de yogur, sobre todo las preparadas con una buena cantidad de especias. Un buen ejemplo es esta receta de pollo asado con dukkah y cus-cus, pero también es una excelente base para marinar. El yogur enternece carnes más secas, como las de las aves, y ayuda a impregnar la mezcla de especias que más nos apetezca.
Con muy pocos ingredientes podemos tener un plato delicioso, como estas chuletillas de cordero a la parrilla con salsa de yogur y menta, o tenemos la alternativa de crear una mezcla muy cremosa y ligera, como este pollo cremoso con yogur al curry, estupendo para ensaladas y bocadillos.
- Brochetas de pollo al limón y yogur
- Magras de cordero con salsa de yogur al estilo oriental
- Muslitos de pollo al yogur y paprika
- Medallones de solomillo de cerdo con pimentón y salsa de yogur
- Contramuslos de pollo al yogur con arroz integral especiado
- Brochetas de pavo y tomatitos al yogur
- Brochetas de pollo marinadas con yogur griego y harissa
- Pollo marinado con yogur picante
- Cordero con yogur y pimentón
Panes y otras masas
Como producto lácteo que es, el yogur puede enriquecer masas de todo tipo, también de panadería. Es habitual encontrarlo en recetas anglosajonas del tipo scones, muffins ingleses o biscuits, sustituyendo parte de la mantequilla que aporta la textura particular de esas masas. En este caso es recomendable usar siempre yogur de leche entera, mejor si es una variedad más espesa como el griego, o colarlo bien para eliminar el suero.
En su versión más ligera y líquida se puede utilizar como haríamos con la leche o el agua en una masa de pan, por ejemplo en esta receta de pan rápido con semillas de chía, lino, calabaza, sésamo y avena. Y, por supuesto, es un añadido perfecto para los rellenos de panes, por ejemplo en un pan de pita con pavo y salsa de yogur.
- Scones de cerezas y yogur griego
- Pan de soda de centeno con yogur y pasas
- Panecillos de yogur y semillas
- Masa de pizza con solo dos ingredientes, receta exprés
- Tortitas de yogur y semillas de amapola
- Pan de yogur
- Pan de pita de pollo asado
Bizcochos y cakes
Si pensamos en repostería casera, seguro que casi todo el mundo visualiza el mítico, tradicional e infalible bizcocho de yogur. Ya sea en su versión puramente más clásica, usando el mismo vaso, o con variaciones, es tan fácil de preparar como irresistible para devorar. ¿Quién no recuerda a su madre preparándolo o ayudando por primera vez a hacerlo en casa?
Pero no es la única receta de bizcocho o masa similar en la que el yogur juega un papel destacado. Se puede emplear también en el toque final, como demuestra el bizcocho de aguacate con glaseado de yogur y nueces, y también da muy buenos resultados en masas más pequeñas como los muffins de limón. En dulces más consistentes, tipo cake o pastel, aligeran la masa para no tener que utilizar tanta grasa, como en el bundt cake de avellanas, yogur y cacao.
- Cake de yogur griego, limón y arándanos
- Mugcake de yogur ideal para desayunos y meriendas
- Bizcocho de yogur de cabra y almendra con naranja confitada
- Bizcocho de yogur con jínjoles
- Bizcocho integral de yogur y sirope de ágave
- Bizcocho de yogur con pasas
- Cake de yogur, limón y semillas de amapola
- Bizcocho de yogur con harina de almendras
- Pastel de chocolate y avellana sin gluten
- Cake de peras y nueces
- Bizcocho con harina de arroz
Postres de cuchara y otros dulces
Por sí mismo el yogur ya es un delicioso -y saludable- postre. Añadiéndole fruta natural o compota casera ya se eleva un poco más, y si encima incorporamos varias capas de colores, algo crujiente, unas cuantas especias... Se puede transformar en todo un postre de cuchara digno para servir a invitados. Estos vasitos de yogur y queso con salsa de frambuesa o el pudding de chía y chocolate con yogur son un buen ejemplo.
Si nos permitimos un capricho para una ocasión especial podemos ampliar el espectro con todo tipo de dulces y postres más elaborados. El yogur combina de miedo con los quesos cremosos en recetas como la crema de cheesecake de yogur y moras, con cremas de vainilla, nata o con frutas y frutos secos. Incluso hace una pareja deliciosa con el chocolate, y estos vasitos de yogur y dos chocolates o el pastel frío de chocolate y yogur griego lo demuestran.
- Tarta de manzana y crema de yogur
- Crema de yogur griego con frambuesas
- Vasitos de mango, yogur y semillas de chía
- Tarta de queso y yogur al limón
- Vasitos de tarta de queso con salsa de fresas al anís estrellado
- Crema de oreo, yogur y chocolate blanco
- Crema de yogur con puré de mango y lima
- Pannacotta de yogur con fresas estofadas
- Quesada fácil con yogur y canela
- Pudding de chía, coco y frutos secos
- Pannacotta de yogur y grosellas
- Tarta de queso y yogur griego
- Vasitos de yogur y gelatina rosa
- Crema ligera de fresas, macarpone y yogur griego
- Tarta de fresas y yogur
- Copa de queso y yogur
Bebidas y helados
Mi vida cambió un poco el día que descubrí el lassi, una deliciosa bebida típica de la India con base de yogur, fruta y especias. El lassi o batido de yogur y mango es un ejemplo de cómo este producto es perfecto para triturar y convertir en una bebida muy nutritiva que nos permite jugar con el resto de ingredientes. Puede sustituir a la leche en un batido normal para convertirlo en smoothie, ya que así será mucho más cremoso -y saciante-. ¿Un ejemplo? Este smoothie o batido cremoso de melocotón y yogur.
También es de mis ingredientes favoritos a la hora de preparar helados caseros, ya sea con heladera o directamente con moldes de tipo polo. Recuerdo muchos veranos de mi infancia congelando directamente los yogures tal cual, introduciendo una cuchara a través de la tapa que luego actuaba a modo de palito para comerlos.
- Helado de frutos rojos y yogur sin heladera
- Helado de yogur griego con fresas
- Semifrío de cerezas, arándanos y yogur
- Helado de cerezas y yogur con solo dos ingredientes
- Yogur griego con lima y cardamomo
- Batido de mango, yogur y zumo de naranja
- Helado de yogur y fresa
- Polos de yogur griego y frambuesas
- Helado de yogur o yogur helado
Otras recetas dulces y saladas
El yogur aún tiene mucho más que decir en la cocina. Para preparar salsas de pasta, en tartas saladas, a modo de cama de unos deliciosos huevos turcos o en un saludable matrimonio con todo tipo de frutas y cereales. Hay propuestas para todos los gustos:
- Medallones de polenta con salsa de aguacate y yogur
- Tarta salada de yogur griego, calabacín y queso feta
- Tarta salada de yogur y queso de cabra con tomatitos
- Garbanzos crujientes con hierbas frescas
- Crujiente de pomelo y yogur en vasito
- Barquitas de papaya con yogur y cerezas
- Melocotones asados con sasla de yogur a la pimienta rosa
- Bolitas de melón con yogur a la menta
- Conchiglie con salsa picante de aguacate
- Yogur griego casero
- Bircher muesli suizo
Desayuno, picoteo, comida, merienda, cena... está claro que el yogur puede dar muchísimo de sí en la cocina. Casero o comprado, si es de buena calidad y natural, merece la pena aprovechar los formatos grandes y tener siempre una buena cantidad en la nevera: al yogur se le puede sacar partido de muchas maneras. ¿Soléis utilizarlo para cocinar?