Nápoles no solo presume de sus fabulosas pizzas, también es cuna de otras comidas callejeras irresistibles
No solo de pizza y pasta vive la cocina napolitana, todo un paraíso para los amantes del buen comer y de mancharse un poco las manos. El fin de semana siempre se presta a dejar las formalidades y las recetas refinadas o ligerísimas a un lado, para disfrutar un poco más cómodamente con algo sabroso con lo que chuparnos los dedos. Y tampoco tiene que ser el gochismo máximo.
Alimentarse a base de entrepanes a diario no es quizá la mejor opción, pero un bocata puede ser un platazo bien equilibrado y además suculento y apetecible, para darse un capricho ocasional y sin necesidad de invertir mucho tiempo en su elaboración. La fabulosa cistecca montese llama a nuestra puerta los viernes.
Típico plato de street food italiano, muy popular en toda la región de Campania pero especialmente en las calles de Nápoles, consiste en un bocadillo generoso de pan alargado relleno con ternera, verdura y abundante queso. Las variaciones son múltiples y al gusto de cada cual, aunque a nosotros nos encanta la combinación de ingredientes con berenjena.
En apenas 25 minutos puedes tener tu cistecca lista para ser devorada, pues la carne, al ser filetes finos, se cocina en un suspiro gracias también a cortarla en tiras. No hay más que sofreír bien la verdura, saltear la ternera, combinar todo colocando encima el queso para que se funda, y montar el bocadillo con una base de lechuga u otras hojas verdes.
Si tostamos el pan o lo marcamos en la misma sartén, recogiendo toda la sustancia que ha dejado el cocinado, quedará aún más bueno. El toque ahumado de la scamorza y esa textura fundente del provolone ponen la guinda a un bocado sublime.
Nápoles, Pompeya y la Costa Amalfitana 4 (Guías de País Lonely Planet)
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