Si quiero cenar bacalao con pimientos le doy forma de tortilla. O me hago con ella un bocadillo de lujo

A menudo nos da pereza cocinar pescado a la hora de la cena entre semana, aunque es una opción la mar de saludable e ideal para la última comida del día. Claro que si lo preparamos de una manera diferente, por ejemplo combinado con los versátiles y también nutritivos huevos, la cosa puede cambiar y resultar mucho más apetecible.

Las tortillas y revueltos nos encantan para improvisar cenas sin complicaciones y también son platos de lujo cuando les ponemos un poco más de cariño y un par de ingredientes de más. Esta receta de tortilla de bacalao con pimientos lo tiene todo para triunfar cualquier día de la semana, y además se adapta bien a muchos acompañamientos.

Podemos hacerla con migas de bacalao desalado, con bacalao fresco o con pescado descongelado, incluso quedaría muy rica también con bacalao ahumado. Y si aprovechamos también verduras ultracongeladas, de las que venden ya cortadas o troceadas listas para cocinar, nos ahorraremos preparar la cebolla y los pimientos, aunque tan solo hay que cortarlos en tiras.

Tras un salteado o pochado de los vegetales, se cocinan con el pescado hasta que deja de estar crudo, y se vierten los huevos -unos seis o siete para 4 personas- o se mezcla todo aparte antes de cuajar en la sartén, como cualquier tortilla. Queda buenísima, muy jugosa, y está rica tanto recién hecha como tibia.

Para acompañarla no necesitamos más que una ensalada o pimientos del piquillo, y si nos vemos con especial apetito, no hay nada como hacerse un buen bocadillo con esta tortilla, restregando primero el pan con tomate maduro y buen aceite. Delicioso.

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