En casa la pasta y el arroz es lo que más nos gusta y cada semana son los protagonistas de nuestra mesa un día cada uno. Como ambos admiten cualquier acompañamiento, me vienen muy bien para sacar de la nevera cualquier cosa que tenga que consumir pronto, así que esta receta de risotto de setas, pollo y jamón es un buen ejemplo para aprovechar algún resto que tengamos.
Aunque originalmente el risotto se hace con un tipo de arroz concreto con grano especial, me encanta hacerlo con arroz tipo bomba, que es el único que utilizo en casa porque se hincha muy bien y absorbe el líquido fenomenal, así que no cambio. Esto podéis variarlo si os interesa y comprar arroz arbóreo que es el especial para risotto.
En una cazuela baja calentamos un poco de aceite de oliva. Salpimentamos y troceamos el pollo y doramos. Agregamos las chalotas picadas, rehogamos. Troceamos las setas y el jamón, las añadimos a la cazuela y dejamos que se haga el conjunto.
Echamos el chorrito de vino blanco, subimos el fuego y dejamos que se evapore el alcohol. Bajamos el fuego a medio, ponemos el arroz y las dos cucharadas de salsa de tomate y removemos todo bien. Por último añadimos el agua o caldo caliente cazo a cazo, dejando que se consuma el líquido antes de añadir el siguiente. Rectificamos de sal si fuese necesario.
Cuando tengamos el arroz en el punto deseado, retiramos la cazuela del fuego, echamos el parmesano rallado, mezclamos y dejamos reposar tapado con un paño de algodón limpio durante cinco minutos. Servimos inmediatamente.
Con qué acompañar el risotto de setas, pollo y jamón
Este risotto de setas, pollo y jamón tiene un sabor contundente y muy rico, así que poco más necesita para su degustación. Recomiendo un vino blanco para acompañarlo y por supuesto antes de servirlo es conveniente dejarle cinco minutos de reposo para que esté en su punto ideal.