Debo reconocer que no soy mucho de comer codillo, de hecho es una pieza que me resulta un poco extraña para comer. Esto de extraño tampoco puedo definirlo mucho, creo que básicamente es que es diferente a otras y de ahí esa sensación. Y hoy he utilizado, además, uno de esos codillos que venden semicocidos para asarlo con unas patatas en papillote.
La verdad que es una buena solución, en ocasiones, comprar comida a medio preparar para darle un toque de gracia que nos permita darle un mejor toque final. Aunque si tenéis tiempo de sobra podéis cocerlo vosotros mismos primero.
Ingredientes para 4 personas
- 2 codillos semicocidos, 4 patatas medianas, 1 cebolla, aceite de oliva, especias al gusto y sal.
Cómo hacer un codillo semicocido al horno
Ponemos el codillo en una bandeja de horno y añadimos un poco de agua, un poco de aceite de oliva sobre el codillo y las especias al gusto. Hoy un poco de ajo molido, cayena, estragón y perejil. Y horneamos durante 1 hora y media a 180 ºC, dando la vuelta a la mitad del tiempo.
Cuando queden 50 minutos introducimos las patatas en el horno. Primero las pelamos y cortamos en rodajas finas y las situamos por capas, con aceite de oliva y sal, en una fuente apta para el horno. Después tapamos con papel de aluminio bien.
A 10 minutos del final quitamos el papel para que las patatas se doren ligeramente. Al sacar del horno, deshuesamos los codillos y ponemos las piezas de carne encima de las patatas. Servimos caliente.
Tiempo de elaboración | 1 hora 30 minutos Dificultad | Fácil
Degustación
La idea de servirlo deshuesado el codillo asado con patatas es porque es una pieza un poco difícil de deshuesar con cuchillo normal. Y de esa forma facilitamos que la gente pueda comerlo sin problemas.
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