Siempre me han impuesto los asados y no ha sido hasta hace muy poco que me he animado a elaborarlos. Pero ahora que me he sacudido el miedo, no hay quien me pare. Esta ternera asada a la mostaza es una de las más ricas que he hecho y que me tiene cautivada. Es perfecta para nuestras celebraciones, al ser fácil y rápida nos dejará tiempo para otras cosas.
Cunde mucho, sobre todo si la cortáis en finas lonchas, que es como más nos gusta. Con una pieza de un kilo, como la que he asado yo, hemos comido cuatro personas hasta saciarnos y, aún así, ha sobrado cantidad suficiente para otro festín. A las sobras les podemos dar otra utilidad. La ternera asada a la mostaza es tan versátil, que no costará encontrar cómo y en qué usarlas.
El lomo de ternera ha de estar bridado para que no se deforme en el horno y se cueza de forma homogénea. Podemos pedirle a nuestro carnicero que lo bride o que nos regale un trozo de malla elástica para carne y hacerlo nosotros en casa. Si no conseguimos ni lo uno, ni lo otro, siempre podemos seguir las indicaciones de este vídeo y lo conseguiremos con facilidad.
Untamos la base de una rustidera con aceite de oliva virgen extra y colocamos en ella el lomo bridado. Salpimentamos por todos sus lados. A continuación, untamos la superficie y laterales con la mostaza de Dijon e introducimos en horno, precalentado a 180 ºC, durante 50 minutos. Si queremos una carne más roja en su interior, reducimos el tiempo según nuestro gusto.
Estas indicaciones de tiempo y temperatura son las utilizadas en el Reino Unido para carnes bien hechas o, como dicen por aquellas tierras, well done. Por cada 450 gramos de carne, se hornea la ternera 20 minutos a 180 ºC. Al tiempo que obtengamos al hacer nuestro cálculo, se le añaden 20 minutos extra. Sirva esta información como punto de partida para adaptar el tiempo a nuestro gusto.
Una vez asado, retiramos el lomo del horno y esperamos 15 minutos antes de trincharlo. Mientras tanto, podemos preparar una salsa con los jugos que ha soltado durante la cocción y usarla para acompañar el lomo. Transferimos los jugos de la rustidera a una cacerola, colándolos para retirar tropezones. Agregamos un poco de vino tinto y flambeamos. Dejamos reducir a fuego suave hasta que alcance el punto de espesor deseado. Salpimentamos al gusto y listo.
Con qué acompañar la ternera asada a la mostaza
La ternera asada a la mostaza es un plato que, guarnecido de verduras varias, soluciona una comida completa sin necesidad de agregar más que un bocado dulce con el que rematar la faena. Es una elaboración nutritiva y sana, pues apenas lleva grasa en su elaboración, por lo que podemos permitirnos el lujo de acompañarla de una copa de buen vino.