La primavera es el apogeo de las ensaladas, más incluso que el verano, porque se juntan el buen tiempo con las ganas de comer bien, así que para que no os aburráis y tengáis variedad donde elegir, os estamos ofreciendo unas cuantas recetas de ensaladas, como esta ensalada agridulce de zanahoria y remolacha con piñones.
Siempre me han gustado las ensaladas con un punto agridulce, como la clásica ensalada de col americana. Esta también tiene ese punto, por lo que es una perfecta ensalada para acompañar carnes, pero ahorrándonos una gran cantidad de salsa -y calorías- por el camino.
Empezamos lavando y rallando la zanahoria. Por otro lado, lavamos también la remolacha, para quitarle el exceso del agua en la que se conserva. Añadimos ambas en un cuenco y aliñamos con un poco de aceite de oliva, sal y un chorrito de salsa Tamari.
La salsa Tamari es una salsa similar a la salsa de soja, aunque más espesa y oscura, de sabor más suave pero a la vez más complejo. Se elabora también a partir de la fermentación de la soja, pero a diferencia de la salsa de soja, ésta no lleva trigo entre sus ingredientes, por lo que es apta para celiacos.
Por último, tras remover bien, añadimos los piñones, decoramos con un poco de perejil picado y servimos como acompañamiento.
Con qué acompañar la ensalada agridulce de zanahoria y remolacha con piñones
La ensalada agridulce de zanahoria y remolacha con piñones es una perfecta ensalada de acompañamiento para carnes de todo tipo. Me encanta la combinación de la zanahoria y la remolacha con la salsa tamari y el toque que aportan los piñones, siempre tan delicados en el paladar.
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