Estamos a finales de mayo y no termina de llegar el ansiado calorcito, pero a pesar de eso en casa nos resistimos a renunciar a los platos y preparaciones refrescantes, es algo así como “llamar al buen tiempo“. Intentamos que las ensaladas estén siempre presentes en nuestra mesa, unos días nos apetecen muy completas y compuestas, otros sin embargo nos decidimos por algunas más sencillas e incluso rápidas de preparar. Sirva esta ensalada de pera y queso emmenthal como ejemplo de lo dicho antes.
Hoy hemos jugado con los sabores dulces y suaves de la pera y el queso emmenthal, haciendo contraste con el agrio del aliño de mostaza. En esta ocasión, y para aprovechar uno de esas muestras que de vez en cuando te dan de regalo en el supermercado, he utilizado una mostaza a las tres hierbas de un bonito tono verde, que le ha dado al aliño un aspecto muy profesional.
Ingredientes
1 bolsa 300 gramos de mezclum (lechuga, escarola, rúcula, canónigos, etc), 150 gramos de queso emmenthal, 4 peras, 2 cucharadas de mostaza a las hierbas, 6 cucharadas de aceite de oliva, 2 cucharadas de vinagre, sal y pimienta.
Cómo hacer ensalada de pera y queso emmenthal
Lavamos y preparamos las hojas del mezclum y lo repartimos todo en los platos donde serviremos las ensaladas.
Limpiaremos y partimos en láminas finitas las peras, no hace falta que las pelemos. Repartimos las láminas de pera sobre el mezclum, una por ensalada. Si hemos comprado peras demasiado grandes utilizaremos dos o tres solamente.
Partiremos el queso en lascas finas, esto lo podemos perfectamente si nos ayudamos con un pelapatatas. Está claro que también repartimos el queso emmenthal en los platos de ensalada.
En un recipiente pequeño, o en un biberón de cocina, preparamos la vinagreta, para eso mezclamos la mostaza, el aceite y el vinagre. Agitamos todo muy bien para que quede bien unido. Aliñamos las ensaladas y las salpimentamos al gusto.
Tiempo de elaboración | 5 minutos
Dificultad | Baja
Degustación
Serviremos la ensalada de pera y queso emmenthal recién acabada de preparar y de aliñar. Esta ensalada es un entrante perfecto para un segundo plato de carne, por ejemplo, pero si queremos convertirla en un plato más completo solo tendremos que añadirle unas legumbres hervidas y unos frutos secos.
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