Aunque este año parece que el clima no es tan crudo como en años anteriores, también en esta época nos gusta preparar ensaladas nutritivas como este salpicón de merluza y gambas con el que resolver una cena sin complicarnos mucho.
En otoño invierno también es muy conveniente tomar ensaladas, pero lógicamente nos toca adaptarlas para que sean más proteicas y nos hagan sentirnos bien pese a que la temperatura exterior sea más baja. Una buena forma de hacerlo es con recetas que usan pescado cocido y mariscos para enriquecer la habitual mezcla de hortalizas picadas.
Ponemos a cocer la merluza en una cazuela con agua, sal y un ramito de perejil. Dejamos que se haga durante unos siete minutos y la sacamos del fuego para retirar la piel y las espinas y obtener la carne. Lo más sencillo es desmenuzarla con las manos.
Por otro lado, cocemos las gambas y las pelamos, reservando junto a la merluza. Ya solo falta preparar las hortalizas y la vinagreta. A mi gusto, lo mejor es preparar todas las hortalizas picándolas en trocitos de tamaño similar para que ninguna destaque frente a las demás.
Para hacer la vinagreta, mezclamos en un vaso los ingredientes indicados y los batimos ligeramente con una cucharilla hasta conseguir una emulsión. Montamos el plato poniendo todos los ingredientes vegetales en un bol, añadiendo la sal y la vinagreta y mezclando bien.
Finalizamos el salpicón colocando encima los trozos de pescado y las gambas, sirviendo en cuencos individuales. Opcionalmente podemos incorporar también unas aceitunas verdes sin hueso y huevo duro picado.
Con qué acompañar una ensalada de invierno, el salpicón de merluza y gambas
Esta receta de ensalada de invierno, el salpicón de merluza y gambas es idónea para tomar a la hora de la cena, ayudándonos a dormir bien sin sentirnos nada pesados. También se puede tomar en pequeñas raciones como aperitivo ya que su sabor es muy agradable y armoniza muy bien con cerveza o con vino blanco.