Lista en sólo 30 minutos. Esta ensalada vegana es mi favorita para disfrutar de una cena ligera y deliciosa

Con ingredientes de temporada y de fácil preparación, es perfecta para degustar cualquier día

Con las fechas de excesos que se vienen en la temporada de fiestas, es muy común el atiborrarnos de comida y sentirnos más 'llenitos' de lo normal, y es lógico: con el montón de compromisos sociales que tenemos en casa, el trabajo y escuela, las comidas están a la orden del día, por lo que, terminar la jornada con una ensalada ligera para cenar es una buena idea.

En términos generales, las ensaladas siempre son una salvación al '¿qué comer hoy?' de cada día: en cuestión de verduras y frutas muchas personas (incluyéndome) las llevan a casa sin tener en claro qué hacer con ellas, y así improvisar recetas como esta calabaza asada con brócoli crujiente, arándanos y almendras, una receta de horno que seguro te encantará.

A veces me cuesta decidir si me apetece más una calabaza guisada, cremosa y melosa, o caramelizada en el horno, asada en su punto. Pero el horno hace el trabajo casi solo y permite cocinar al mismo tiempo varios ingredientes, que además transforma por completo verduras como el brócoli.

Comenzamos con esta preparación precalentando el horno a 200ºC. Lo primero es preparar las verduras. Pelar 400 gramos de calabaza, usando un pelador, cortando el tallo y la base.

Abrimos longitudinalmente con un buen cuchillo y sacamos las semillas y los filamentos. Cortamos en cubos y cortamos los ramilletes del brócoli, dejando el tallo más grande central para otra receta, o usar también en esta.

Cortamos en porciones que sean más o menos de tamaños parecidos, y aprovechamos también las hojas. Cuidamos de lavar y escurrir con suavidad para colocar la calabaza y el brócoli en una bandeja o fuente de horno y mezclar con todos los demás ingredientes: chile en copos, hinojo seco, ajo granulado al gusto, pimienta negra, arándanos, almendras, un chorro de sidra de manzana y sal gruesa ajustando las cantidades.

Una vez que todos los ingredientes estén integrados, es recomendable usar un poco de ralladura de limón y luego un poco de jugo. Mezclamos bien usando las manos limpias, y colocamos uniformemente en la charola para hornear.

Metemos al horno durante unos 30 minutos, removiendo de vez en cuando y añadiendo un chorro más de sidra si fuera necesario, a mitad de la cocción. Cuando falten unos 10 minutos, aprovechamos para tostar las almendras en otra fuente, vigilando bien que no se quemen.

Servimos mezclando una porción con almendras, arándanos frescos lavados y un chorrito de aceite de oliva virgen extra, sal gruesa y más hierbas al gusto.

Merece la pena hacer una buena cantidad de esta receta de calabaza asada con brócoli crujiente, aunque seamos pocos en casa. Podemos tomar un cuenco de primer plato o a la hora de la cena, sin nada más, pues es saciante pero ligera. 

Para que sea más completa podemos añadir arroz blanco o una porción de legumbres cocidas. También es una buena guarnición de carne o pescado (aunque ya no sería vegana, claro), y huevo o un poco de tofu también asado le iría igual de bien.

En DAP | Cómo hacer tortillas de maíz para tacos, receta básica mexicana

En DAP | Huevos rellenos: siete recetas diferentes para picotear este finde

Ver todos los comentarios en https://www.directoalpaladar.com

VER Comentarios

Portada de Directo al Paladar