Casi nadie conoce esta receta de mejillones típica de Zamora, pero no tiene nada que envidiar a la marinera

Y se hace en apenas un cuarto de hora

Es muy posible que todo el mundo piense en los mejillones a la marinera como la mejor receta posible cuando hablamos de cocinar este molusco. No vamos a negar que es una de las formas más eficaces y sabrosas que hay en la cocina española para resolver un aperitivo barato, saludable y sabroso.

Sin embargo, todo aquel que ha pasado alguna vez por la ciudad de Zamora y ha tenido el privilegio y la suerte de alternar en alguno de sus bares, se habrá dado cuenta que en esta capital castellanoleonesa hay una receta icónica de mejillones que bien podemos emular en casa.

Un vistazo a…
Pescado a la plancha: trucos para que no se pegue y la piel quede crujiente

En este sentido, vamos a hablar de los populares tiberios, un clásico que se empezó a hacer en el Bar Bambú y que ahora es muy frecuente ver en otros muchos establecimientos y que, en esencia, no dejan de ser unos mejillones picantes.

Como en tantas otras recetas de mejillones, el primer paso es tener moluscos de calidad vivos, que serán los protagonistas de la preparación. Luego solo vamos a tener que hacer una especie de salsa brava, bastante parecida a como la haríamos si lo que quisiéramos preparar fueran unas patatas bravas.

Lo único que hay que hacer es primero, limpiar bien los mejillones bajo un chorro de agua fría, eliminando las barbas y frotando la concha. Cuando estén listos, los cocemos en una cazuela, con un vasito de agua pequeño, un poco de sal y un chorro de vino blanco, dejando que se abran al vapor cuando ya estén abiertos, eliminamos una de las valvas y reservamos los mejillones, mientras que el caldo de cocción lo guardamos también.

Mientras poníamos en marcha ese proceso, aparte rehogamos una cebolla bien picadita con un poco de ajo en una sartén con una pizca de aceite. Cuando la cebolla esté traslúcida, añadimos una  cayena, un poco de pimentón y dejamos que todo se integre, evitando que el pimentón se queme.

Cuando ya esté listo, agregamos el caldo de cocción de los mejillones y la harina de trigo que habremos desleído en un poco de agua. Dejamos que todo reduzca unos minutos y luego lo trituramos con la batidora de mano. Después solo hay que salsear los mejillones y servir, comiéndolos calientes.

Imágenes | DAP

En DAP | Mejillones al vapor

Ver todos los comentarios en https://www.directoalpaladar.com

VER Comentarios

Portada de Directo al Paladar