Hoy quiero presentaros una receta que nos deja contentos siempre que la preparamos, pues combina sus excelentes sabor y textura con la sencillez de la preparación. Y lo mejor, la ventresca de bonito al horno, es un auténtico manjar, que podemos tener listo en la mesa en poco menos de 30 minutos y sin manchar más cacharros que la fuente del horno.
La receta, además, se presta igual de bien a ser ventresca de bonito al horno, como es el caso, pero también se puede hacer con ventresca de atún, que da un resultado muy similar y nos permite no depender tanto de la temporada.
En cualquier caso, el resumen es que vamos a utilizar la parte más grasa y sabrosa de un túnido, por lo que debemos tener cuidado a la hora de añadir más grasa de la cuenta y, sobre todo, de utilizar productos como aliño que no enmascaren su sabor.
La clave, como veréis, es dejar el bocado tierno y jugoso, con un punto ligeramente rosado de la carne, pues este tipo de cortes se asemejan más a ciertos mamíferos como la ternera o el cerdo que a la mayor parte de los pescados.
Ingredientes
- Ventresca de bonito 1
- Diente de ajo 2
- Perejil una rama
- Sal
- Aceite de oliva virgen extra 50 ml
Cómo hacer ventresca de bonito al horno
- Tiempo total 20 m
- Elaboración 5 m
- Cocción 15 m
Lo primero, tenemos que limpiar muy bien la ventresca. Esta pieza suele tener una telilla de piel amarilla o verdosa que hay que retirar, porque si no puede dar sabor amargo, y de paso, vigilamos porque puede que encontremos alguna espina, que retiraremos.
Una vez esté perfectamente limpia, colocamos la ventresca con la parte de la piel hacia abajo sobre una fuente de horno en la que la asaremos a continuación, en posición de gratinador o grill. Como la pieza de ventresca era de un atún pequeño, daba para dos buenas raciones, por lo que la dividí en dos mitades.
Para aliñar la ventresca, preparamos un aceite de ajo y perejil, triturando con la batidora los dos dientes de ajo y la rama de perejil con el aceite de oliva, y guardamos el líquido resultante al que en casa llamamos ajopere, en un biberón.
Ponemos un pequeño pellizco de sal en la ventresca y la cubrimos generosamente con un buen chorreón de ajopere del biberón y la horneamos a 200 ºC durante unos 10-15 minutos. Como cada horno tiene sus tiempos, tenéis que vigilar para que no se reseque ni se queme. Lo ideal es que en cuanto empiece a tomar color, apaguéis el horno, y la dejéis que se atempere para servir inmediatamente, pues es una pena que estas piezas de pescado tan exquisitas salgan pasados de horno o se nos resequen.
Con qué acompañar la ventresca de bonito al horno
Lo mejor de la ventresca de atún al horno, es ir desgranando cada uno de los filetes o lamas de que se compone, al tomar cada porción. Esta maravillosa pieza de pescado, la podéis tomar en compañía de un vino blanco bien frío, mejor si es de vuestra zona y no demasiado afrutado. Con una ensalada fresca como guarnición y una ración de la ventresca de atún al horno, tenéis lista una comida o cena, que recordaréis sin duda, durante muchos días.
En DAP | Recetas de atún
En DAP | Recetas de bonito