Pocos pescados nos gustan tanto como el rodaballo, un plato que hoy hemos cocinado al estilo de Carnota (Galicia), con una receta del libro A mi manera, de Karlos Arguiñano. Se trata de un rodaballo al horno con refrito o ajada, muy fácil de hacer y lleno de sabor.
Siguiendo las instrucciones del cocinero vasco, tendremos en la mesa este espléndido pescado en menos de 30 minutos, incluido el tiempo de preparar la guarnición que nos sugiere, una fritura de patatas con ajo, cebolla y pimientos similar a nuestras patatas a lo pobre, que han acompañado al rodaballo a la perfección.
Si encontráis en la pescadería un buen rodaballo de kilo y pico, lo podéis preparar a sabiendas de que va a quedar en su punto, jugoso, lleno de sabor y con esa textura tersa que tanto nos gusta en casa. Vamos a la cocina que este pescado lo tendremos listo en media hora.
Ingredientes
- Rodaballo 1.5 kg
- Vino blanco
- Dientes de ajo para el refrito 2
- Guindilla un trozo para el refrito
- Aceite de oliva virgen extra para el refrito, 4 cucharadas
- Perejil para la guarnición
- Patata para la guarnición 2
- Cebolla para la guarnición 1
- Pimiento verde italiano para la guarnición 1
- Dientes de ajo para la guarnición 2
- Aceite de oliva virgen extra abundante, para freír la guarnición
- Sal y pimienta al gusto
Cómo hacer rodaballo asado con refrito de Karlos Arguiñano
- Tiempo total 30 m
- Elaboración 5 m
- Cocción 25 m
Barnizamos con un poco de aceite de oliva la bandeja del horno y acomodamos el rodaballo salpimentado directamente sobre ella, añadiendo un poco más de aceite de oliva por encima. Metemos en el horno precalentado a 220ºC y dejamos que se cocine durante 10 minutos
Abrimos el horno y añadimos el vaso de vino blanco de ribeiro, y dejamos que se siga cocinando a la misma temperatura durante otros 15 minutos más. Mientras se va cocinando el rodaballo preparamos la guarnición.
Picamos las patatas en rodajas, pelamos los ajos y cortamos la cebolla en juliana. Lavamos un pimiento verde y lo cortamos en trozos, friendo todo junto en la sartén. Vigilamos de vez en cuando y vamos removiendo hasta que las patatas se comiencen a dorar y todo esté blandito y listo para comer.
En una sartén aparte, preparamos el refrito o ajada, dorando unos dientes de ajo fileteados con unos trocitos de guindilla. Cuando tengan un bonito color, apagamos el fuego y añadimos unas hojas de perejil, volcando el contenido de la sartén sobre el rodaballo cuando lo saquemos del horno, y llevándolo a la mesa en la bandeja de horno para porcionarlo ante los comensales.
Con qué acompañar el rodaballo al horno con refrito de Karlos Arguiñano al estilo de Carnota
Para acompañar la receta de rodaballo al horno con refrito de Karlos Arguiñano al estilo de Carnota te recomendamos lo mismo que nos propone el cocinero, preparar unas patatas a lo pobre que completan el pescado en un menú delicioso.
A mi manera: Las recetas fundamentales de la cocina regional española (No Ficción)
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