Pastel de patatas gratinado con queso emmental: receta fácil con tres ingredientes

¡Gracias!
1 votos

Lo peor de los viajes son las esperas entre trayectos, estaciones y aeropuertos. Pero siempre se puede pasar el tiempo recurriendo al infalible quiosco, donde siempre nos esperan varias revistas de cocina. Admito que son toda una tentación, sobre todo en el extranjero; así fue como me quedé con esta receta de pastel de patatas gratinado con queso emmental, demasiado fácil y tentadora.

Efectivamente, es una receta muy sencilla si no esperamos tampoco un resultado visualmente fino y elegante, aunque tengo que admitir que esperaba un mayor desastre al desmoldarlo. Para jugar un poco con el color utilicé también algunas patatas azules, pero son un detalle totalmente prescindible. Como guarnición que cunde mucho -porque es muy saciante-, es un plato estupendo para salir de la rutina.

Un vistazo a…
Tres recetas al horno fáciles y rápidas, para comer bien sin despeinarse

Ingredientes

Para 6 personas
  • Patata azules o blancas, o un mix 1.5 kg
  • Queso emmental 200 g
  • Nata líquida para cocinar 200 ml
  • Pimienta negra molida (opcional)
  • Perejil fresco (opcional)
  • Sal

Cómo hacer pastel de patata gratinado

Dificultad: Fácil
  • Tiempo total 1 h 20 m
  • Elaboración 20 m
  • Cocción 1 h

Precalentar el horno a a 170ºC y engrasar un molde redondo desmontable de unos 20 cm de diámetro, o forrar con papel sulfurizado. Si lo usamos más grande, el pastel quedará más fino y probablemente se cocinará antes.

Lavar muy bien las patatas y pelarlas. Cortar en rodajas de algo menos de un dedo de grosor, casi como si fuéramos a hacer una tortilla. Colocar una capa de patatas en el fondo del molde, procurando no dejar grandes huecos vacíos. Añadir pimienta negra y una capa de queso emmental rallado.

Cubrir con otra capa de patata y repetir la operación hasta terminar con todas. Mezclar la nata con una pizca de sal y pimienta y repartir por encima para que se distribuya bien por todo el pastel.

Hornear durante 50 minutos y añadir otra capa de queso rallado por encimapara terminar de gratinar, devolviéndolo al horno unos 10-15 minutos más. Si se quemara el queso demasiado rápido, tapar con papel de aluminio. Esperar a que se enfríe un poco antes de desmoldar con mucho cuidado.

Con qué acompañar el pastel de patata

Este pastel de patata sencillo ya comentaba que es saciante, así que nos bastará una pequeña porción para acompañar a modo de guarnición cualquier plato de carne o pescado. También podemos montar un plato combinado con verduras, una ensalada ligera y la proteína magra que más nos apetezca, incluso una porción de legumbres como garbanzos salteados o lentejas aromáticas. Si sobra, se puede recalentar sin problemas.

Se le puede dar más gracia al gratinado añadiendo al final del horneado mezclando el queso con mantequilla, pan rallado y algunas hierbas, o un toque de nuez moscada. También podríamos jugar con diferentes tipos de queso.

¡Gracias!
1 votos

Ver todos los comentarios en https://www.directoalpaladar.com

VER Comentarios

Portada de Directo al Paladar