La coliflor con bechamel es un plato bien conocido y uno de nuestros favoritos, pero si buscas una alternativa diferente, esta receta de gratinado al curry tiene las papeletas de quedarse en tu recetario para siempre. Acompañada de otra verdura de temporada como es el colinabo, que también suma puntos en el horno, esta receta es sencillísima y admite muchas variaciones al gusto particular.
Tomando esta elaboración original como inspiración, hemos usado nata ligera de cocina sin lactosa en lugar de leche de coco porque es lo que teníamos en casa, añadiendo un poco de parmesano rallado antes de hornear. En lugar de mezclar la salsa a mitad del horneado, hemos preferido mantener una especie de doble capa, y el resultado ha sido un éxito. Dicho lo cual, puedes proceder en casa como te plazca, incluso añadiendo mucho más queso especial para gratinar o usando una alternativa vegana.
Precalentar el horno a 180ºC con aire, si tiene. Cortar la coliflor en ramilletes de un bocado, dejando algunas piezas irregulares o más grandes para jugar con las texturas, y lavar y escurrir. Cocer al vapor, en agua hirviendo o en el microondas, apenas unos 8-10 minutos, dejándola crujiente.
Vaciar el bote de tomate en una fuente de horno. Añadir todas las especias, la levadura de cerveza, el jengibre fresco rallado y un poco de sal y pimienta molida. Mezclar bien y echar la coliflor escurrida. Lavar el colinabo, pelar ligeramente y cortar en tacos o cubos pequeños. Incorporar y remover.
Mezclar aparte la nata líquida o leche de coco con la levadura de cerveza, salpimentar y echar más especias si se desea. Cubrir con esta mezcla las verduras, añadir más pimienta y queso parmesano rallado al gusto.
Hornear a media altura unos 15-20 minutos, hasta que la verdura esté tierna pero no muy blanda; echar más queso (opcional) y subir de nivel activando el gratinador o con la potencia al máximo para gratinar brevemene. Vigilar bien que no se queme.
Con qué acompañar la coliflor gratinada con colinabo y curry
Es un plato tan gustoso y suculento que, sinceramente, es una gozada para disfrutarlo solo. Como complementos, suman sabor y textura los cacahuetes tostados, un poco de ralladura y/o zumo de limón, y cilantro o perejil fresco picado. Esta coliflor gratinada puede ser también un primer plato de cualquier menú, o guarnición de carnes y pescados.
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