Más fáciles que los espaguetis carbonara e igual de ricos: los fettucine que enamoran con solo dos ingredientes

No todas las grandes recetas de pasta llegan de Italia y, algunas, incluso son mejores

Mejor Pasta Carbonara Espaguetis
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Siempre hay un enorme cacareo cuando hablamos de cocina italiana, quizá la más popular –para bien y para mal– del mundo. Especialmente cuando salen a la palestra determinadas recetas, teóricamente tradicionales, que cuando se rasca un poco resulta que no lo son tanto.

Eso es lo que le sucede a la salsa carbonara, en la que la teoría de la auténtica cocina italiana avala la presencia de huevo, guanciale y pimienta negra como elementos diferenciadores y no el concurso de la nata.

Un vistazo a…
7 MITOS QUE TIENES QUE SABER DE LOS VEGETARIANOS Se me cae un mito

Sin embargo, para no andar polemizando más de la cuenta, hoy os traemos una receta de espaguetis que es perfecta para no andar peleándose con el huevo batido, intentando hacer que la carbonara no se cuaje y, sobre todo, que ningún purista proteste más de la cuenta por echar nata a la salsa.

Básicamente porque lo que hoy os traemos no es una receta italiana, sino una receta estadounidense y no son otra cosa que los clásicos fettucine alfredo, seguramente el plato con pasta que más se ha internacionalizado desde la cocina de Estados Unidos.

Y sí, están tan ricos como unos carbonara, y sí, no hace falta ser Massimo Bottura para esta receta que, aparte de la pasta, solo lleva dos ingredientes principales: queso parmesano y mantequilla. También lleva sal, pimienta negra y agua, pero no nos vamos a poner tan tiquismiquis con el terreno de los ingredientes de más.

Lo único que hay que tener claro es que la mejor pasta para este tipo de recetas de salsas densas y cremosas es la pasta larga y ancha, como los fettucine, aunque valen también los tagliatelle o, incluso, unos espaguetis –o los spaghettoni–. También es mejor que busquéis una pasta fresca al huevo, como los nidos, que dan buen resultado.

Cocemos la pasta, dejándola al dente, y reservamos el agua de cocción. Por eso, también, es útil que sea una pasta al huevo, que dejará un agua de cocción más densa y sabrosa.

En una sartén aparte, echamos un par de cazos del agua de cocción, incorporamos la mantequilla y con unas varillas removemos hasta que se derrita. Pasado ese tiempo, incorporamos parte del parmesano rallado y también hacemos que se derrita.

Cuando los lácteos estén bien integrados, incorporamos la pasta a la sartén, removiendo para que se impregne y, si vemos que queda seco, algún cucharón más de agua de cocción. Luego agregamos el resto del queso, varios toques de pimienta negra y servimos.

Imágenes | DAP

En DAP | Recetas de espaguetis

En DAP | Receta de espaguetis carbonara

Inicio