Por qué la lechuga y otras hojas verdes de ensalada se ponen rosas (y cómo saber si te las puedes comer)

Al igual que las manzanas y el aguacate, la lechuga en contacto con el aire se oxida (y se torna rosa)

El cambio de color en la lechuga y otras hojas verdes de ensalada, específicamente a tonalidades rosadas o rojizas, es un fenómeno natural que se llama oxidación.

Al igual que sucede con las rodajas de manzanas y el aguacate abierto, este proceso ocurre cuando las células de la planta se dañan, ya sea por cortes o por el paso del tiempo, liberando enzimas que reaccionan con el oxígeno del aire. Esta acción libera compuestos llamados fenoles, que al oxidarse se transforman en pigmentos de color rojizo o marrón. La intensidad del color dependerá en parte de la variedad de la hoja, su frescura y las condiciones de almacenamiento.

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Además de la oxidación, la exposición a temperaturas extremas, ya sea frío o calor, puede dañar las hojas y acelerar el proceso de oxidación. La humedad excesiva también puede favorecer el crecimiento de bacterias y hongos, que pueden producir pigmentos rosados o marrones como respuesta. Algunas variedades de lechuga, como la radicchio, tienen naturalmente pigmentos rojizos que se intensifican con el tiempo o bajo ciertas condiciones de cultivo.

Es importante saber cuándo una hoja verde con tonos rosados es segura para consumir. Si el color rosado es leve y las hojas aún tienen una textura crujiente y un olor fresco, es probable que la oxidación sea la causa y la hoja este en buen estado y comestible.

Sin embargo, si el color es intenso, las hojas están blandas, viscosas o tienen un olor desagradable, es mejor desecharlas, ya que podrían estar en mal estado o contaminadas con bacterias. En caso de duda, la recomendación es optar por hojas frescas y de aspecto saludable para evitar cualquier riesgo bromatológico.

Para evitar que la lechuga llegue a este estado, se debe controlar por ejemplo la temperatura de almacenamiento. La lechuga debe refrigerarse inmediatamente después de comprarla. La temperatura ideal es entre 1 y 4 ºC en el cajón de verduras, se mantiene la humedad optima. Mismo, el exceso de humedad favorece la oxidación. Por esto, envolver las hojas limpias de la lechuga en papel de cocina o toallas de papel absorbente es una estrategia eficaz.

A la hora de manipular, evita cortar las hojas con cuchillos de metal, ya que esto acelera la oxidación. Es mejor utilizar un cuchillo de cerámica o simplemente romper las hojas con las manos, y tener así la base para armar una de las 15 ensaladas de hojas verdes que más nos gustan.

Imagen | Foto 1: freepik, Foto 2: azerbaijan_stockers

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